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Familias viven drama por falta de agua, recurso que se agota a pasos acelerados  

Debido al crecimiento poblacional, falta de políticas de manejo y uso irracional, miles de familias de Villa Nueva y municipios aledaños sufren escasez de agua.

Nancy Hernández, vecina de la colonia Militar La Selva, zona 8 de Villa Nueva, aprendió a vivir con poca agua. (Foto Prensa Libre: Óscar Felipe Q.)

Nancy Hernández, vecina de la colonia Militar La Selva, zona 8 de Villa Nueva, aprendió a vivir con poca agua. (Foto Prensa Libre: Óscar Felipe Q.)

En un recóndito sector de la colonia Militar La Selva, Ciudad Peronia, zona 8 de Villa Nueva, Guatemala, unas cien familias viven la falta del vital líquido, pues únicamente lo reciben por 30 minutos cada tres días, tiempo que aprovechan para llenar un tonel y una pileta.


Nancy Hernández, quien vive junto a sus cinco hijos en una covacha de lámina y piso de tierra, comenta que el agua que recibe únicamente le alcanza para bañarse, para el sanitario y la limpieza de la casa, en tanto, para lavar la ropa debe trasladarse a los lugares aledaños, donde sufren menos por la escasez.

Para Hernández, la llegada de la época de lluvia es bendición, debido a que el nacimiento que abastece a toda la colonia produce más agua, ya que en ocasiones les dan acceso hasta una hora de servicio; además, aprovechan para recibir el agua de lluvia.

“Vivir sin agua es cuestión de adaptación. Cuando no tenemos servicio miramos que hacemos, acarreamos en tambos y cubetas”, expone la vecina, quien cuenta que llegó hace cuatro años a esa colonia y que sus primeros 12 meses los pasó sin servicio de agua entubada.

En la misma situación vive María Elena Aguilar, residente de dicha colonia, quien cuenta que paga Q40 mensuales a la asociación de vecinos, que constantemente trabaja en el nacimiento para que el agua llegue hasta los hogares.

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Aguilar cuenta que también compra cinco garrafones de agua purificada cada tres días -gasta Q50- para afrontar la escasez. Añadió que la colonia tampoco cuenta con servicio de drenaje.

Rosbin Rodríguez, originario de Zacapa y vecino de la colonia, comentó que se han adaptado a la regulación del servicio, los 30 minutos que reciben agua cada 72 horas solo le alcanza para llenar algunas cubetas y un tonel.

A la gente que tiene suficiente agua le aconsejo que la cuiden y que hagan buen uso de ella. Hemos visto que utilizan mangueras para lavar carros o regar las plantas, es un lujo que nosotros no nos podemos dar”.


Similares problemas enfrentan los vecinos del sector El Calvario, también en la zona 8 de Villa Nueva, quienes comentan que solo tienen agua una hora cada dos días, situación que les ha enseñado a reutilizar el vital líquido, pues el agua para el lavado de ropa también lo utilizan para la limpieza de la casa.

Sandra Gómez, vecina del referido lugar, dice que, a pesar de la carencia, tiene un jardín verde, el cual riega con poca agua dos veces a la semana y durante las noches.

La escasez de agua también se refleja en otras zonas de Villa Nueva, Mixco, Chinautla y Ciudad de Guatemala, donde los afectados piden a las autoridades tomar acciones para mejorar el servicio.

Menos agua

De acuerdo con Diego Recalde, representante en Guatemala de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO, en inglés), quien se basa en los resultados de varios estudios, la oferta total de agua en la zona metropolitana es de mil 909 millones de metros cúbicos, pero el 42 por ciento se pierde por medio de la evapotranspiración, el 36% por escorrentía y solo el 22% se almacena en el suelo y recarga los mantos acuíferos.

Sandra Gómez, vecina del sector El Calvario, zona 8 de Villa Nueva, lava ropa con poca agua. (Foto Prensa Libre: Óscar Felipe Q.)

Recalde agregó que uno de los problemas es que aproximadamente el 30% del territorio del área metropolitana está urbanizado, con lo que la infiltración es limitada en estas zonas.

Los estudios calculan que en el 2020 la condición cambiante del clima incidirá en una reducción del 8.1% del agua disponible, además existen zonas de importancia hidrológica que pierden su cobertura, por lo que las pérdidas podrían llegar a 10%.

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“Dicho de otra forma, el cambio climático y la degradación de los ecosistemas incidirá en la reducción de la disponibilidad de agua. Si a esto se suma que el incremento de la población de la ciudad influirá en una mayor demanda de agua se hace evidente que es necesario tomar acciones para la protección del recurso”, dijo Recalde.

Otras cifras

  • 97 mil 120 millones de metros cúbicos es el caudal de agua anual en Guatemala, según la Segeplán.
  • 59.5% del agua es utilizada en la agricultura y el 18% para la generación de energía, según el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales.

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