La creencia cuenta que el indígena mexicano Juan Diego Cuauhtlatoatzin tuvo apariciones de ella, quien luego de ayudarle a curar a un tío enfermo le pidió la construcción de un templo.
Como prueba de estos encuentros celestiales la virgen morena le puso de tarea subir al cerro del Tepeyac para llevar unas rosas como muestra de sus milagros.
Él llevo las rosas en su chal hasta el párroco de su pueblo, quien quedó aún más sorprendido el ver cómo en la prenda de Juan Diego se observaba a la misma Virgen de Guadalupe.
Desde entonces, en México se celebra cada 12 de diciembre los milagros de la Virgen de Guadalupe con una serenata a la media noche y una serie de oraciones en los templos dedicados a la santa.
Devoción guatemalteca
En Guatemala cientos de familias acudieron este 12 de diciembre al Santuario de Guadalupe a mostrar devoción a la Virgen de Guadalupe, cuyas apariciones a San Juan Diego en el cerro del Tepayac cumplen 490 años.
En el templo ubicado en la zona 1 capitalina se observaron largas filas de familias para ingresar al santuario. La permanencia fue de máximo un minuto con el fin de resguardar los protocolos de bioseguridad.
Los Milagros
A lo largo de la historia han ocurrido varios sucesos que se le atribuyen a la “Virgen Morena” como milagros, algunos podrían ser solo coincidencias, pero otros parecen no tener explicación.
- Historiadores sostienen que durante la epidemia de cocoliztli, que en 1554 había matado a más de 12 mil personas en México, rezos multitudinarios en su santuario lograron el cese de esta crisis sanitaria.
- Mientras que en 1663 hubo una procesión con la imagen de la Virgen de Guadalupe ante la epidemia de la denominada “tos chichimeca” o “tos ferina” y tiempo después fue contenida.
- Por otro lado, la fiebre tifoidea asolaba a México en 1737, con más de 40 mil decesos, hasta que el 23 de mayo de ese año se nombró a la virgen como “Nuestra Señora de Guadalupe”, patrona del país, y ese día no hubo fallecidos.
- En 1921 un hombre atentó contra la imagen de la virgen, al colocar una bomba debajo de su imagen en la Antigua Basílica. Aunque la explosión provocó graves daños, la estructura de Guadalupe se mantuvo intacta.