Expertos en vida silvestre aseguran que los animales no se acercan a los seres humanos, pues debido al crecimiento poblacional y el cambio de uso de la tierra, las poblaciones cada vez ocupan más espacio de los bosques, lo que significa que el hombre invade las áreas habitadas por diversidad de especies.
Fuentes del Consejo Nacional de Áreas Protegidas aseguran que muchos de los ataques que han documentado llevan implícitos actos de crueldad, pues los animales son capturados, amarrados y golpeados hasta causarles la muerte, pues, por desconocimiento, los pobladores los asocian con mitos y leyendas urbanas.
Último caso
El lunes 22 de julio trascendió que un grupo de personas de San Alfonso, San Martín Zapotitlán, Retalhuleu, golpearon y quemaron a una nutria o perro de agua al creer que se trataba de “el Win”,un mítico personaje de una leyenda comunitaria, en un hecho que fue repudiado por el Conap.
De acuerdo con la información, el animal aún fue rescatado, pero debido a la gravedad de las lesiones murió mientras era tratado por un veterinario del Conap.
Según el Conap, muchos animales silvestres llegan a zonas urbanas, debido a la pérdida de su hábitat o porque algunas personas las tienen como mascotas y escapan o son liberados.
Añadió que esos ataques se deben al desconocimiento de las personas, pues en este caso lo más preocupante es que esa especie está en peligro de extinción.
El director regional de Conap, David Barillas, dijo que las nutrias se encuentran protegidas, por lo que harán una investigación para individualizar a los responsables y luego entablar una demanda.
Adriana Reyes, vecina, comentó que las autoridades deben investigar las razones por las cuáles los pobladores mataron de manera violenta a un animal.
“Es lamentable que la falta de información sea la causa de muerte de una especie que aún se tiene en esta región, y en lugar de golpearlos debemos cuidarlos porque son parte de nuestro entorno”, dijo Reyes.
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Carlos Orellana, otro poblador, refirió que las autoridades deben de hacer campañas de información en las comunidades donde hay vida silvestre, porque no es el primer reporte de vecinos que matan a un animal por desconocimiento.
El cadejo
En enero del 2017, un grupo de pobladores de San Rafael Pacayá 2, Coatepeque, Quetzaltenango, mató a un micoleón, pues aseguraban que se trataba del cadejo.
En aquel entonces los vecinos dijeron que ese animal había matado perros, aves de corral e incluso entrado en algunas viviendas.
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Otro animal que es asociado con mitos y leyendas es el oso hormiguero, por lo que se tienen reportes de ataques contra estos en sectores de Petén, donde personal de la Asociación Rescate y Conservación de Vida Silvestre (Arcas) ha rescatado varios ejemplares, los cuales son sometidos a un proceso de readaptación y luego liberados en su hábitat.
Conservacionistas hacen un llamado a la población para que cuando tengan contacto con especies exóticas alerten a los expertos para que estos los rescaten y regresen a la selva.
Además, solicitan que por ningún motivo los lastimen, pues muchos de ellos son inofensivos y se encuentran en peligro de extinción.
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