La Policía Nacional Civil informó que líderes del grupo no accedieron a desocupar del forma voluntaria el inmueble, por lo que al intentar las fuerzas de seguridad hacer valer la orden de desalojo, los invasores lanzaron botellas con gasolina, palos y piedras a los uniformados.
Debido a esto, agentes antimotines utilizaron gases lacrimógenos para retomar el control.
Se reporta la captura de dos mujeres y un hombre, quienes fueron trasladados al Juzgado de la localidad.
Luego de los incidentes, autoridades recuperaron la propiedad y quedó bajo resguardo de agentes de seguridad privada contratados por el supuesto propietario.
Al menos 150 familias retiraron sus pertenencias luego de los incidentes.