En tanto, pasajeros miraban la pelea campal entre ambos ayudantes que, pese a que curiosos intentaron apartarlos, estos insistían en darse de golpes.
Finalmente decidieron dejar la pelea al escuchar las insistentes bocinas de los vehículos que habían quedado atrapados en el tránsito.
Usuarios manifestaron que es habitual ver cómo pilotos y ayudantes se insultan y agreden, pero lo más temeroso es cuando abusan de la velocidad para llegar primero a las paradas de pasajeros, lo cual pone en riesgo la vida de las personas.
También denunciaron que no hay presencia de la Policía en esa carretera para verificar el comportamiento de los transportistas.