El edificio tiene más de 20 años y por falta de mantenimiento hay fallas en los sanitario y duchas, lo que impacta en el proceso de recuperación de los pacientes, pues para hacer uso de esos servicios deben de hacer turnos.
“Mi hija tiene ocho días de estar internada y debe hacer turno para usar las duchas, porque solo dos funcionan. Otro problema es que carecen de aparatos y uno debe hacer los exámenes en entidades privadas, se supone que uno viene a un hospital -público- porque no tiene dinero y siempre hay que gastar”, comentó Gloria Esperanza Ramírez, pariente de una paciente.
El sistema eléctrico es otro de los problemas, pues debido a que el cableado tiene varios años de uso, el voltaje no es estable y causa que los pocos aparatos con lo que se cuenta fallen, como ocurrió con la máquina de rayos equis.
“Llevé a mi hijo al hospital por una fractura en la pierna, pero tuve que pagar Q150 por una radiografía en un lugar privado, ya que el equipo del hospital está en mal estado”, dijo Alejandra Valenzuela, residente de El Semillero.
Otro de los problemas que señalan los pacientes es la falta de atención en el área de laboratorio. “Lo único que uno se salva es de pagar la consulta, porque solo una receta dan”, comentó Rocío Pérez, vecina de Tiquisate.
Parientes de algunos pacientes, quienes deben cuidar de ellos por las noches, se quejan por el viento que entra por las ventanas, pues a estas les faltan vidrios. “Por la madrugada corre aire frío, si nosotros que estamos sanos nos afecta, cómo la pasaran nuestros pacientes”, comentó Erick Gómez, residente de Tiquisate.
Remozarán
Norberto Cuevas Alfaro, director del Hospital Nacional de Tiquisate, comentó que tiene dos años al frente de este nosocomio y que han tenido que solventar muchas de las necesidades, pues asegura que lo recibió en “total abandono”.
Agregó que el año pasado solicitaron a la Unidad de Planificación Estratégica del Ministerio de Salud el remozamiento del edificio. “Los ingenieros de esa dependencia ya vinieron hacer una evaluación técnica, por lo que la reestructuración de todo el hospital está en proceso”, aseguró Cuevas.
Añadió que se hará la remodelación de todas la áreas, incluido el muro perimetral, cableado eléctrico, sanitarios, vidriería, baños, pintura y todo lo relacionado a infraestructura.
Con respecto al abastecimiento de medicamentos, Cuevas dijo que están en 90 por ciento. “El paciente recibe atención médica y sus medicamentos, alguna excepción posiblemente sea que se les dé una receta, pero tenemos un buen abastecimiento de antibióticos, analgésicos, antipiréticos, soluciones intravenosas y todo lo concerniente a equipo médico, como jeringas y alcohol”, aseguró.
Agregó que el aparato de rayos equis hubo un problema por el flujo de voltaje el 15 de diciembre del año pasado y que por falta de repuestos no ha sido reparado; además, dijo que el hospital cuenta con un equipo digital, que fue donado por la embajada de Japón, pero este también se dañó, aunque técnicos trabajan para restablecer el servicio.
El facultativo dijo que, dada la importancia del hospital, a largo plazo se planifica la construcción de una emergencia y un intensivo pediátrico y de adultos.
En este nosocomio laboran 276 personas y trabaja con un presupuesto que supera los Q30 millones al año.