Familiares de Tupul informaron a los agentes de la PNC que este laboraba como cortador de caña y que había recibido una llamada telefónica de parte de su excónyuge, con quien había terminado su vínculo desde hace un año, debido a aparentes problemas de infidelidad de parte de la mujer.
Agregaron que la llamada fue para citarlo en el lugar del crimen, y que cuando llegó fue atacado a balazos por un hombre que tomaba licor.
“La expareja de Tupul vive con otro hombre, y ella le exigía dinero para sus hijos”, agregaron familiares de Tupul.
Investigadores de la PNC indicaron que la hipótesis es que pudo haberse tratado de un crimen pasional, y que investigarán quién es la exconviviente de la víctima.
Algunos pobladores que presenciaron el ataque agregaron que están preocupados, debido a que la tiendas se han convertido en cantinas, donde hay personas que provocan escándalos y que funcionan como guarida de delincuentes.
Exigieron a las autoridades que estos comercios ya no vendan licor.