Trabajadores de las dependencias estatales que funcionan en la edificación, informaron que esta tiene rajaduras en varios sitios y fallas esctructurales que ocasionan que haya una leve oscilación en el inmueble.
Expresaron que los movimientos son más sensibles cuando hay muchas personas en el edificio, por ejemplo cuando se efectúa una reunión del Consejo Departamental de Desarrollo.
“Hay una grieta que atraviesa todo el edificio, y se puede ver desde la entrada hasta donde están los baños. Una parte del piso del salón de sesiones ya se levantó, y cuando llueve, el agua se filtra por la terraza”, dijo un empleado de la Gobernación que pidió no revelar su identidad.
Responsabilidades
Varios vecinos coincidieron en que no muchas personas saben sobre los daños en el edificio, pero que si fue mal construido, las autoridades deben deducir responsabilidades a quienes lo edificaron.
“Deberían buscar a la empresa que construyó el edifico, para que expliquen el porqué de la mala calidad del trabajo que hicieron. Esa obra se hizo con los impuestos del pueblo y qué pena que las autoridades de ese entonces no se hayan preocupado por verificar que todo estuviera bien antes de recibir el edificio”, indicó Mario Enrique López, vecino de Guastatoya.
Rigoberto Sosa, otro poblador, dijo que ahora las autoridades se deben preocupar por buscar una solución para evitar que la estructura se desplome.
“Hay que buscar expertos para que la obra sea reforzada y se pueda salvar la construcción, que a mi parecer, es un bonito edificio, y sería lamentable que se caiga”, agregó Sosa.
Es habitable
Héctor Pérez, delegado de departamental de la Conred, informó que ya se emitió un informe sobre los daños que tiene la estructura.
Puntualizó que se contrató a un ingeniero estructural, quien dictaminó que el edificio es habitable por el momento; sin embargo, se hicieron varias recomendaciones para evitar que colapse.
“Nosotros ya emitimos un informe sobre lo que sucede con el edificio de la Gobernación. Los daños que tiene la construcción no son por el terremoto del 7 de noviembre del 2012, son daños por la mala construcción, y es una situación que viene desde hace cuatro años”, indicó Pérez.
Confirmó que el informe sobre la situación del edificio lo presentaron el 6 de febrero último y entre las recomendaciones que se emitieron está el reforzamiento de toda la estructura y la reparación de varias áreas.
“Nosotros no somos un ente ejecutor, y los trabajos que allí se tengan que hacer corresponderán directamente a las autoridades de la Gobernación Departamental”, agregó.