De acuerdo con personeros de la comuna local, debido a la caída del muro algunas tumbas con restos humanos fueron dañadas, por lo que se coordinó la reconstrucción.
La Unidad de Servicios Municipales informó que el colapso de 30 metros de muro se debió a la acumulación de agua en las bases de la construcción, por lo que ahora se colocará un refuerzo en la parte que fue dañada.
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El alcalde Rolando Aquino Guerra señaló que se trabaja para garantizar que el muro esté listo antes del 1 de noviembre, cuando se celebra el Día de los Santos Difuntos, cuando decenas de personas visitan al camposanto.
“Las copiosas lluvias han ocasionado daños en diferentes sectores, donde llevamos a cabo trabajos de rehabilitación; además, una cuadrilla municipal limpia y prepara varios sectores del cementerio para que esté listo el 1 de noviembre”, agregó el jefe edil.
El juez de Asuntos Municipales, Julio Sagastume, manifestó que las bóvedas que quedaron sobre el área peatonal fueron removidas con presencia de autoridades competentes y se les brindó un área física “digna” donde puedan permanecer los restos humanos para que familiares puedan visitarlos.
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“Las autoridades deben de contar con un plan de contingencia ante desastres naturales, ya que nuestro país es vulnerable a ellos, afortunadamente ya llevan buena parte del muro perimetral construido para resguardo de quienes pasamos todos los días por este lugar”, expresó Roberto Sosa, vecino.
“Vengo a visitar a mi madre una vez al mes, me sorprendió que cerca de donde se encuentran sus restos había tumbas caídas, por fortuna la de mi mamá no tuvo daños”, comentó Rosalía Gómez, otra vecina.
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