Varios vecinos calificaron el hecho como una falta de respeto hacia los difuntos y exigen al Ministerio Público (MP) efectuar las investigaciones para dar con los responsables de la profanación.
De acuerdo con el personal encargado del camposanto, la bóveda tenía una abertura, que supuestamente se hizo con una barra metálica. Sin embargo, el ataúd estaba intacto. Además, varios arreglos florales fueron arrojados a escasos metros de la bóveda.
“Ahora hasta los difuntos son víctimas de la delincuencia, que hace deshace a su antojo sin que exista ninguna medida para frenar la situación”, manifestó Virgilio Sánchez, vecino.
“Tal vez creyeron que la bóveda tenía algún objeto de valor y decidieron abrirla, para poderla robar. Ya ni los difuntos tienen paz. La delincuencia no tiene límites”, refirió la vecina Carol España.
Los guardianes del cementerio sellaron de nuevo la bóveda con cemento, luego de la autorización de la familia.
Familiares de Vacaro comentaron que el profesor sufría quebrantos de salud y fue hallado sin vida el domingo por la mañana en su hogar.
Vacaro fue docente gran parte de su vida, también destacó en la cinematografía, donde hizo varios cortometrajes. Además, practicaba dibujo, pintura y escultura.