Añadieron que esta negativa de la comuna es un acto de discriminación, ya que como campesinos no pueden tener voz para impedir la construcción de mineras, hidroeléctricas, y otros proyectos en ese municipio.
En la comuna, las personas serían atendidas por el concejal primero Saúl Ramírez, pero los inconformes rechazaron la propuesta y exigieron hablar con el alcalde Ramón Díaz Gutiérrez.
La situación fue tensa en el edificio municipal, y los manifestantes amenazaban con tomar medidas de hecho si no eran escuchados.