María Teresa Escamilla, coordinadora del Programa de Adaptación del Cambio Climático de la referida cooperación, indicó que el motivo de apoyar la actividad, obedece a la preocupación que hay por el efecto del cambio en el clima.
Añadió que de acuerdo con un informe, 2.5 millones de personas son afectadas en Centroamérica por el cambio climático, de las cuales, 1.5 millones son de Guatemala.
Añadió que importante mantener las buenas prácticas de conservación.
Carlos Monterroso, viceministro de Ambiente, dijo que las comunidades tienen la solución en sus manos, por lo que hay que promover las prácticas antiguas de conservación de semillas.
Cambian forma de cultivar
René Sis, agricultor, manifestó que es importante reconocer las prácticas de los ancestros; sin embargo, varios agricultores han cambiado la forma de cultivar la tierra.
Durante la actividad, la cooperación alemana presentó el carbón de bambú como alternativa para preservar la humedad de los suelos.