10 maneras para tomarse un break en el trabajo
Tomarse un descanso en medio de la rutina es favorable y necesario para tu salud.
Una larga jornada laboral puede llegar a ser agobiante. Someterse a una gran cantidad de presión por lapsos prolongados provoca estrés y malestares a nivel físico debido a la tensión muscular y la postura. Sobre todo, si tu trabajo se desarrolla en un escritorio, frente a una computadora. Algún break de vez en cuando te dará el descanso que necesitas para recargar energías. Existen muchas maneras de tomarte un respiro:
- Ejercita tus manos y tus brazos: el uso prolongado del mouse y el teclado pueden generar dolor y cansancio en tus manos. Tómate un pequeño break y aléjate de escritorio. Jala tus manos para abajo y para arriba. Sacúdelas, muévelas en círculos y luego ábrelas y estira tus dedos. Sentirás una gran mejoría y podrás continuar con tus labores.
- Gira tu cabeza para la derecha y luego para la izquierda, por 5 segundos de cada lado.
- Entrelaza tus manos y colócalas detrás de tu nuca durante 5 segundos.
- Vuelve a entrelazar tus manos y estíralas al frente con las palmas hacia afuera, durante 15 segundos.
- Cruza tus piernas, gira el torso para el lado contrario y gira también tu cabeza para el mismo lado durante 10 segundos. Luego repite para el lado contrario.
- Sube los hombros como si no te importara nada, durante 5 segundos, tres veces.
- Coloca tu brazo izquierdo por atrás de tu cabeza y jala tu codo con la mano derecha al mismo tiempo que arqueas tu espalda, durante 5 segundos y luego repite del otro lado.
- Entrelaza tus manos y estira tus brazos por encima de tu cabeza, con las palmas de las manos hacia afuera, durante 10 segundos.
- Sentado en tu silla, dobla el torso hasta tocarte la punta de los pies y mantén esta postura durante 5 segundos.
- Encuentra un lugar callado: si puedes cierra la puerta de tu oficina o sal a la azotea.
- Coloca una mano en tu estómago y otra en tu corazón: al hacer esto, toma también respiros hondos y prolongados y siente tu corazón y tu estomago mientras haces esto.
- Reconócete: date cuenta de cómo te sientes en ese momento. Si te sientes tranquilo, triste, abrumado, estresado etc. No te juzgues, solo reconoce el sentimiento y acepta lo que sientes en ese momento.
- Acepta las distracciones: seguramente será difícil encontrar un lugar completamente libre de bulla. De hecho, estos ruidos podrían ayudarte a mejorar tu meditación. Al sentirte distraído, regresa tu atención a tu respiración y a los movimientos de tu corazón y estómago. Esto te ayudará a retomar tu atención en las cosas en las que debes enfocarte cada vez que te distraigas.
- Elige una palabra: la que quieras, puede ser amor, puede ser playa, pueden ser animales. Con cada inhalación y exhalación, piensa en esa palabra. Si es algún sentimiento, permítete sentirlo con cada respiración. Puedes hacer este ejercicio con cualquier palabra, solo déjate llevar por la imaginación y la calma de ese momento.
- Disfruta el proceso y hazlo seguido: la buena noticia es que no hay reglas para la meditación. Lo puedes hacer cuando y donde quieras. Como sea que lo hagas, que sea para darle calma a tu día y reconocer lo que sientes. Recuerda que esta bien distraerse y retomar la atención cuando esto suceda.