Víctor M. Ruano

Víctor M. Ruano

NOTAS DE Víctor M. Ruano

A las puertas de la Navidad una vez más, deseamos que esta fiesta sea la oportunidad para renovar la esperanza y alimentar nuestra utopía, que es Jesús y su Evangelio, sobre todo cuando hoy las dinámicas corruptas e impunes que permean nuestras frágiles democracias están apagando los sueños de una sociedad libre, igualitaria y fraterna.
Más de mil católicos de todo el país, entre laicos y curas, obispos y religiosas se reunieron a mediados de noviembre, durante tres días, en la ciudad de Huehuetenango para reflexionar sobre la parroquia, esa estructura eclesial que agrupa a los feligreses de un determinado territorio en una diócesis, para poner en marcha su transformación misionera, de tal modo que responda a los desafíos de la sociedad de hoy y a la reforma de la “Iglesia en salida” que impulsa el pontificado de Francisco, desde los horizontes abiertos por la Conferencia Episcopal de Aparecida, hace ya más de una década.
El Parlamento del Pueblo Xinka, por medio de sus legítimos representantes, denuncia la mediación sesgada que impulsa la Asociación Internacional Caritá Política, entre Tahoe Resources-Minera San Rafael y las comunidades del área de influencia del proyecto minero el Escobal.
Se instaló en el país la narco-clepto-cracia. Es el mayor logro de la administración de Jimmy Morales. Esta es la verdadera amenaza a la seguridad nacional.
La patria somos nosotros mismos, actualmente luchando a brazo partido y contra corriente, en la construcción de una Guatemala distinta y mejor, en medio del descalabro generado por este gobierno que, como los anteriores, la han mancillado por corruptos.
Los estudios antropológicos de las universidades de San Carlos y del Valle, elaborados a pedido de la Corte de Constitucionalidad, afirman la existencia del pueblo xinka en la región donde opera la minera San Rafael. La CC en su resolución exige hacer la consulta para autorizar sus operaciones, porque el Estado, por medio del Ministerio de Energía y Minas, faltó a su responsabilidad. Ese error se cometió en los demás proyectos de exploración y explotación de metales en el país. Por tanto, son ilegales.
También Jalapa y Santa Rosa lo son, aunque el racismo de la élite gobernante de este país y círculos urbanos ladinos con ínfulas de superioridad pretendan negarlo. En estos tres departamentos del suroriente está presente el pueblo xinka de Guatemala por el conjunto de valores humanos, religiosos y culturales que inspiran la vida y alimentan las creencias de la mayoría de los ciudadanos. Además, comparten las mismas costumbres y tradiciones ancestrales que se aprecian en sus artesanías, vestuario, alimentos, territorio, organización social y algunos monumentos históricos.
Esta es la situación que vive Quesada, en Jutiapa, es decir, una criminalización despiadada, como tantos pueblos de Guatemala y América Latina, que han tenido el coraje de enfrentar un Estado cooptado por mafias corruptas, criminales e impunes, y al poderoso capital nacional y transnacional que, en su afán lucrativo, empobrecen a los pueblos, como se constata en tantos lugares donde se han instalado industrias extractivas y empresas de generación eléctrica que no favorecen a los ciudadanos sino a los gestores del gran capital.
“Alentamos la participación plena en acciones efectivas que resistan estas políticas injustas”. (Teólogos de Estados Unidos)
Kakistócratas han gobernado Guatemala. Hoy lo hace una “tropa loca”, comandada por el señor Jimmy Morales y su Gabinete, por la falta de rumbo y la dinámica perversa que les mueve, hasta convertirse en un vergonzoso ejemplo de kakistocracia, término acuñado por el filósofo y politólogo italiano Michelangelo Bovero, al describir el gobierno de los peores, de los corruptos, de los cínicos, de los mediocres.