Mario Alberto Molina

Arzobispo de Los Altos, en Quetzaltenango. Es doctor en Sagrada Escritura por el Pontificio Instituto Bíblico. Fue docente y decano de la Facultad de Teología de la Universidad Rafael Landívar.

NOTAS DE Mario Alberto Molina

Los cristianos creemos en un oxímoron: tenemos por salvador a un hombre derrotado.
El rito no tiene valor, si no lo sustenta la integridad moral de quienes en él participan.
La fe en la vida eterna como destino para el creyente es la esperanza propia del cristiano.
Sorprendentemente no somos tan autónomos e independientes como pretendemos.
El trabajo es la forma básica por la que los humanos adquieren propiedad privada.
Recibir el Cuerpo y la Sangre de Cristo implica una comunión real con el mismo Dios.
Como toda actividad humana, también la comunicación tiene su ética.
¿Les parece justo delante de Dios que les obedezcamos a ustedes antes que a él?
Cuando dio a su Hijo al mundo, Dios manifestó su amor por el mundo.
El Dios saludable ha sido siempre el que se deja someter a la pregunta sobre su verdad.