La familia guatemalteca "Rivera" tomará una de las decisiones más difíciles para salvar su vida: regresar a su país, seguir en Tijuana o continuar su proceso para obtener asilo humanitario en Estados Unidos.
Un cuarto frío y sus hijos enfermos y llorando por hambre es lo que recuerda Elizabeth, originaria de Guatemala y madre de tres niños, durante la semana que estuvo detenida en las oficinas de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, en inglés) conocida como la "hielera".