Trágicamente nos vemos de nue- vo en la situación de condenar  actos de terrorismo producto del fanatismo religioso,  que no tiene justificación alguna. El hecho de violencia ocurrido este fin de semana en Dinamarca, en  el cual un joven que bajo la bandera del fundamentalismo islámico atacó disparando una actividad pública  sobre "El arte, la blasfemia y la libertad de expresión",  y luego un ataque a una Sinagoga, nos hacen reflexionar sobre dos temas fundamentales del momento: la libertad de expresión y la libertad de religión. He insistido en que debemos generar una cultura de paz basada en el respeto y la solidaridad entre los pueblos, sin importar su raza, cultura o religión, y especialmente educar a la niñez en relaciones normales de respeto y armonía, pero que esto debe entenderse como parte del mundo de la ética y las relaciones humanas y sociales que  no puede ser entendido como una obligación del Estado.

Estos días en que a nuestra querida Guatemala se le ha nublado el horizonte debido a las erupciones volcánicas que nos entierran en ceniza, cabe recordar el antiguo principio de vida que "del polvo vienes y en polvo te convertirás", pues este pensamiento es una gran enseñanza para quienes olvidan que lo único que dejamos en el mundo es el valor de nuestras obras y lo único que nos llevamos es el juicio que de nuestra propia vida hagamos a partir de esas obras. Aquellos que quieren diariamente enriquecerse a partir de la pobreza de nuestro pueblo y sus condiciones de vida, que quieren generar supuestas "regiones de competitividad" disminuyendo un salario mínimo que ya de por sí no satisface las necesidades de las y los guatemaltecos.

Recientemente el presidente Obama anunció que establecería un fondo especial de US$2 mil millones de ayuda para desarrollo de Centroamérica, con énfasis  en los tres países del Norte del Istmo, que a pesar de ser países cercanos a  Estados Unidos habían casi desaparecido de la agenda, manteniéndose únicamente en la lógica del combate del narcotráfico, del crimen organizado y de las maras; con muy poco énfasis en el desarrollo de lo  económico social, a pesar de que, en particular en Guatemala, hay crisis sociales  alarmantes, como desnutrición, falta de escolaridad, desempleo y deterioro del ambiente, entre otros. El tema de la justicia casi se limitó a la capacitación de jueces, fiscales y policías, sin plantear una transformación del sistema que logre una justicia efectiva. 

La visita de Michelle Bachelet es una ocasión para reflexionar sobre lo que los grandes estadistas  como ella hacen para  ratificar  los principios que  fortalecen la democracia desde una perspectiva humana y con conciencia social. Michelle Bachelet, que además es doctora en Medicina, surge como víctima del golpe de Estado realizado por Pinochet en 1973. Aprendió de su padre lo que son los verdaderos  valores de un militar constitucionalista, que como general de la fuerza aérea se rehúsa a apoyar un golpe inconstitucional y un atentado a la democracia en el país y,  por ello, es ejecutado por los militares de Pinochet.  Ella aprendió en forma directa  que existen militares con principios que están dispuestos a defender a su país y el modelo democrático de gobierno. La señora Bachelet  y su familia sufrieron persecución, lo que la obliga a salir de Chile.

Una vez más encontramos que hay actos de justicia que aunque tardan en llegar generan una leve expectativa de convertir a Guatemala en una verdadera democracia. La justicia no es fácil en ninguna parte del mundol, pero la población espera que jueces y magistrados hagan su mayor esfuerzo y tengan la valentía de actuar independiente a todas las presiones que se dan en una sociedad, aplicando el Derecho. Sobre la condena de Pedro García Arredondo por los hechos de la quema de la Embajada de España, a la Justicia le tomó 35 años reaccionar, a pesar de que los medios de 1980 publicaron su fotografía dirigiendo los operativos del comando VI en aquel fatídico 31 de enero, convirtiendo una protesta pacífica en un infierno de fuego que costó la vida a los miembros del CUC, personas de organizaciones que los acompañaron, al personal de la Embajada, a académicos del Derecho entre los que se encontraba un ex vicepresidente del país.

El debate sobre la niñez centroamericana que emigra sin acompañamiento a EE. UU.  ha continuado,  se ha intensificado y lamentablemente se vuelve parte de los ataques partidarios de los  republicanos  y sectores conservadores,  contra los demócratas y la administración Obama.  Las cosas que se dicen son absurdas, desde calificar la migración como una amenaza a la estabilidad en el trabajo y la economía norteamericana   hasta  querer plantearlo como un problema de seguridad nacional,  etiquetando a los niños  como terroristas o narcotraficantes. De hecho,  el gobernador Perry, de Texas, envió mil 500 efectivos de la guardia nacional del Estado a la frontera, para reforzar "la defensa fronteriza contra los migrantes", con lo cual podemos interpretar que él pretende declarar  la guerra a la niñez centroamericana.

El nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha dado importantes señales de vida y determinación en el cumplimiento de su mandato, lo que saludamos con mucho entusiasmo y optimismo. Ordenaron un cese inmediato de toda propaganda política a favor de los candidatos, aplicando la limitación de la ley que solo se puede hacer propaganda electoral durante el "período electoral mismo", y para ello les da exactamente 30 días, bajo el apercibimiento de ser suspendidos si no cumplen. Adicionalmente, el TSE le hace ver al Gobierno que no puede hacer campañas de publicidad de la obra que realiza, si esto significa el apoyo a un candidato como en el caso de uno de sus ministros. Este es un paso importante, pues es una norma que sistemáticamente se viola y anteriormente solo aplicaban una multa por monto irrelevante que los partidos y candidatos pagaban con gusto, burlando así el espíritu de la ley.