El 2016 presenta un reto de convivencia sociopolítica económica y cultural para los guatemaltecos, en donde todos debemos trabajar intensamente para lograr el beneficio de una convivencia democrática, en donde mejoremos las condiciones de vida y evitar practicar la envida, la difamación, el rencor, el odio, la violencia, la soberbia, la corrupción y la explotación.