Salud y Familia

La ciencia avanza cada vez más a cirugías poco invasivas

La ciencia asegura que un 80 por ciento de cirugías podrían resolverse mediante técnicas poco invasivas. ¿Qué se sabe sobre este procedimiento, sus riesgos y avances?

La medicina moderna incorpora enfoques mínimamente invasivos en prácticamente todas las áreas de la cirugía y su aplicación continuará expandiéndose. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

La medicina moderna incorpora enfoques mínimamente invasivos en prácticamente todas las áreas de la cirugía y su aplicación continuará expandiéndose. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

La cirugía mínimamente invasiva es la que se realiza por medio de pequeños cortes y pocos puntos. Durante una cirugía como esta se hace una o más incisiones pequeñas en el cuerpo y se introduce un laparoscopio (instrumento delgado en forma de tubo con una luz y una lente para observar) a través de una abertura a fin de guiar la cirugía.  Para realizarla, se introducen instrumentos quirúrgicos diminutos a través de otras aberturas.

Efe en el 2017 publicó que al menos 80 por ciento de las cirugías en América Latina podrían realizarse mediante técnicas poco invasivas, principalmente la laparoscopía, que a mediano plazo resultan menos costosas para el sistema de salud.

Las instituciones sanitarias podrían evitar entre 500 mil y un millón de días de hospitalización al año si aplicaran estas técnicas en los pacientes de casi todas las especialidades médicas, según Jeffrey Hazey, profesor de la Universidad Estatal de Ohio y médico del Wexner Medical Center.

En la actualidad pocos pacientes tienen acceso a esta solución cuando la finalidad sería que un universo más grande lo tuviera como una opción.

La cirugía de mínima invasión puede ser practicada para curar enfermedades en especialidades como neurología, urología, traumatología o ginecología, entre otras.
El paciente se recupera en menos tiempo y puede regresar a sus actividades cotidianas en pocos días. Al hacer incisiones más pequeñas, se reduce su exposición a infecciones y disminuye el dolor posoperatorio.

¿Qué pasa durante la operación? El paciente recibe anestesia. Luego se hacen pequeños cortes en la piel o se inserta el endoscopio a través de las aberturas naturales del cuerpo. Las imágenes aparecen en monitores para que los médicos procedan. En algunos procedimientos se insertan instrumentos y herramientas quirúrgicas a través de otras pequeñas incisiones. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

Se debe estudiar bien al paciente antes de someterlo a este proceso. Por ejemplo, alguien que ha pasado por múltiples cirugías y tiene muchas adherencias, podría no ser un buen candidato, pero eso depende de otros factores que evalúen los profesionales.

Por el momento,estas operaciones son costosas, pero a la larga son benéficas para el sistema de salud y los gobiernos, pues no sólo permiten que el paciente esté menos tiempo en el hospital, sino que logran que se reincorpore rápido a sus actividades laborales, lo que genera menos inversión en recursos hospitalarios y por pagos de incapacidad médica para las empresas.

Héctor Luna, cirujano gastrointestinal y endoscopista, de Clínicas Punto 10 dice que esto se sigue innovando cada día más, siempre hay una cámara nueva, una pinza o un procedimiento.

El médico también explica que toda operación tiene riesgos por muy sencilla que parezca, no tiene más complicaciones que la cirugía abierta, “sí es importante que el médico esté entrenado y preparado, no cualquiera puede hacer cirugía laparoscópica para reducir cantidad de complicaciones”, agrega.

En el futuro se espera diversidad de cambios y evoluciones con respecto de estas cirugías. Luna, por ejemplo, menciona que dentro de unos años se verá con más frecuencia un cambio en las cirugías Da Vinci, que utiliza la robótica y podría llegar a consolidarse la posibilidad que el médico puede estar en Francia y operando en Estados Unidos. “Es una cirugía robotizada que está pensada para una posible migración de los humanos incluso fuera del planeta, para los astronautas, por ejemplo, en donde solo necesitarían que viaje un anestesiólogo y que desde la Tierra se les pueda operar”, agrega.

No fue fácil aceptarla

En la historia existe un antes y un después en el momento que aparece esta opción, una forma sencilla de entenderla es que en una operación que antes se hacía abriendo y cortando tejidos, ahora solo es por un par de agujeros, dice Luna.

A su favor comenta que cuando empezó a especializarse esta opción ya existía en el país, esto hace 20 años. “Todos los cirujanos que nos graduamos en el sistema nacional actualmente tenemos la preparación para hacer una colecistectomía o cirugía de vesícula laparoscópica”, dice el médico quien comenta que, de todas las operaciones por este medio, esta es la más frecuente aunque podrían entrenarse en otras cirugías.

Luna también se fue a especializar fuera del país para conocer otras modalidades modernas.

El médico Estuardo Jacinto Behrens, con especialidad en este tipo de cirugías, comentó durante la lección inaugural en la Facultad de Ciencias de la Salud, de la Universidad Rafael Landívar que este tipo de cirugía al principio fue desarrollada por ginecólogos quienes trabajaron técnicas laparoscópicas.

¿Qué pasa durante la operación?
El paciente recibe anestesia. Luego se hacen pequeños cortes en la piel o se inserta el endoscopio a través de las aberturas naturales del cuerpo. Las imágenes aparecen en monitores para que los médicos procedan.
En algunos procedimientos se insertan instrumentos y herramientas quirúrgicas a través de otras pequeñas incisiones. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

No era aceptada por los médicos generales porque se tenía la idea que los grandes cirujanos tenían que hacer grandes incisiones.

Entre los grandes pioneros está el médico alemán Kurt Semm en la década de 1960. Fue considerado loco y casi fue expulsado de la Academia Alemana de Ginecobstetricia porque se creía que estaba poniendo en riesgo a la población.

En la historia otro médico alemán de nombre Erich Mühe fue encarcelado por esta innovación en el momento que uno de sus pacientes falleció. Sin embargo, años después se reconoció su aporte a la ciencia y la creación del galloscopio, es decir el propio laparoscopio que él fabricó.

Al principio la laparoscopía se utilizaba únicamente para ver y en Guatemala uno de los que hacía esto era el médico Rodolfo Herrera Llerandi, uno de los grandes representantes de la medicina guatemalteca del siglo XX, quien introducía una cámara en el ombligo y observaba. En ese tiempo se inflaba el área con aire, lo cual producía cierto dolor, pero actualmente es dióxido de carbono el que se usa y esto evita molestias y se elimina más rápido, agrega Luna.

Otros nombres de guatemaltecos que se mencionan como pioneros de estas técnicas en el país en la década de 1990 fueron Marco A. Peñalonzo, Mario Duarte y Edgar Herrera Ríos, agrega Behrens, quien apoyó en la primera colecistectomía o cirugía de vesícula por videolaparoscopia en el Hospital General San Juan de Dios, el 4 de agosto de 1991.

Efectividad

El Departamento de Cirugía, Centro Médico de la Universidad de Nebraska, hizo una comparación de resultados entre procedimientos laparoscópicos y por método abierto para ver las diferencias.

Se incluyeron seis procedimientos quirúrgicos que se realizan con frecuencia.

En el estudio participaron 208 mil 314 pacientes que se sometieron a uno de los seis procedimientos quirúrgicos habituales, ya sea por vía abierta o laparoscópica.
En general, el abordaje laparoscópico mostró una mortalidad significativamente menor, una menor morbilidad, menos ingresos en la sala de cuidados intensivos y reingresos a los 30 días, una estancia hospitalaria más corta y una reducción significativa de los costos hospitalarios de todos los procedimientos.

En la estratificación por gravedad de la enfermedad, el grupo laparoscópico mostró resultados quir úrgicos mejores o comparables en todos los grupos de gravedad de la enfermedad.

La tasa de reingreso a los 30 días para los pacientes de gravedad mayor y extrema fue comparable entre los dos grupos para la mayoría de los procedimientos quirúrgicos.

Después de una operación mínima invasiva

Siga las recomendaciones de su profesional de salud porque puede variar la situación, según el tipo de intervención.

En las primeras 24 horas podría existir dolor y controlarlo con medicamentos. En el caso de cirugías relacionadas con el sistema digestivo se recomienda que el paciente deambule rápido, es decir no pasar demasiado tiempo acostado. Es importante caminar y así eliminar dióxido de carbono que se utilizó.

Ocho diez días después de una operación de vesícula el paciente puede estar recuperado en gran parte de sus actividades normales, mientras que si se hace abierta en ese mismo tiempo todavía se tiene dolor y reposo.

Después de una operación laparoscópica se espera una recuperación más rápida del paciente. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

¿Qué tipos de cirugía se hacen con laparoscopía?

En la actualidad un gran número de procesos pueden hacerse con esta metodología, pero lo importante es que los médicos sean entrenados en estas especialidades.

Las más frecuentes son:

• Cirugía antrirreflujo
• Colectomía para extirpar parte de un colon enfermo
• Cirugía de oído y garganta
• Cirugía de vesícula (colecistectomía), para eliminar los cálculos biliares que provocan dolor
• Cirugía gastroenterológica, incluido el bypass gástrico para la obesidad.

ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.