CABLE A TIERRA
El pueblo de Guatemala contra el PactoDeCorruptos
Da una rabia enorme lo que ha hecho, doctor Giammattei. A muchos no les sorprendió, dados sus antecedentes. Demasiado rápidamente se decantó por un estilo de gobierno represivo y antidemocrático. Lo llevó al extremo al nombrar como ministro de Gobernación a una persona absolutamente no idónea para el cargo y que, habiendo tenido puestos públicos previamente, fuera destituido por otros gobiernos por su proceder violento y opaco-delincuencial. ¡Mire lo que ha hecho ese señor, junto con el viceministro de Seguridad y el director de las fuerzas antimotines que comanda la “Policía nacional civil”!
' ¿Quién va a responder por estos jóvenes, doctor Giammattei?
Karin Slowing
Evidentemente no tienen ni idea de que su obligación es igual a la de todos los demás funcionarios públicos: salvaguardar la vida y la libertad de los ciudadanos, y, en este caso, su derecho a la manifestación y la protesta. Los actos vandálicos contra edificios públicos, que según la evidencia audiovisual que circula ampliamente en redes sociales apunta a hechos que posiblemente fueron preparados para deslegitimar las movilizaciones ciudadanas, no justificarán JAMÁS la violencia ejercida contra gente inocente: arrastrar mujeres por el suelo, apresar madres con sus hijos, golpear y apresar periodistas, capturar manifestantes, echar gases lacrimógenos en lugares con altas concentraciones de personas que estaban en paz. Ahora dos jóvenes perdieron parcialmente la vista porque los antimotines les dispararon a la cara, les lesionaron el cráneo. ¿Qué es esto, por Dios?
¿Quién va a responder ahora por estos jóvenes? Les dañaron sus vidas para siempre y eso no puede quedar impune. ¡El Estado debe resarcirlos y los responsables, incluyendo quienes dieron las órdenes de atacar a la población desarmada, deben ser destituidos y entregados a la justicia para que sean procesados por sus delitos!
Explique, además: ¿Qué derramamiento de sangre querían hacer el sábado 21 de noviembre que los antimotines escondieron armas, municiones, bombas y otros artefactos en tragantes? Es más: ¿Por qué sacó a los antimotines?
Están demasiado acostumbrados a atropellar y violentar a las comunidades indígenas. Aisladas y dispersas en las montañas y valles alejados del país, es más fácil para ustedes ejercer violencia contra la población en el área rural: asesinatos políticos contra líderes comunitarios, contra integrantes de organizaciones campesinas y de partidos políticos de base rural, y que esta pase desapercibida. Están demasiado acostumbrados a usar y abusar de la gente. Ahora trasladan sus prácticas barbáricas a las ciudades.
Estamos hartos de que se roben el dinero de nuestros impuestos, mientras la gente que más necesita de ellos tiene el agua al cuello, tiene hambre, lo perdió todo y ustedes son incapaces de brindarles siquiera la ayuda humanitaria que necesitan con desesperación. El presupuesto es la punta del iceberg de una inconformidad que crece porque usted, jefe de Estado, consiente que el Congreso y su partido Vamos no elijan magistrados probos; cuando alienta la violencia como forma de control ciudadano; cuando complace a sus financistas y achichincles sin importarle que se roben todo y destruyan lo poco que queda de institucionalidad pública.
El soberano es el pueblo y ya le dimos instrucciones: ¡Vete el presupuesto! La reprogramación debe hacerse en enero, con un ministro/a de Finanzas que no responda a intereses sectoriales; destituya a su equipo de Gobernación y póngalo a disposición de la justicia; cierre el Centro de Gobierno y ponga a un equipo probo y competente en los ministerios y secretarías. Ordene a su partido en el Congreso y alcaldías que cesen las transas y elijan a magistrados probos para las cortes.