“Entendemos que es indispensable someternos a las pruebas y sabemos que hay de tres tipos: PCR, de antígeno y una que denominan serológica. Nosotros, obviamente, buscamos las fuentes de ingreso que nos vayan a financiar estas pruebas”, señaló William Rosales, gerente de la Liga.
Los ingresos económicos, que tanto han mermado en los equipos por la prolongada pausa provocada por la pandemia del coronavirus, es lo que genera más preocupación en las directivas de los clubes, pues según indicó Jaime Sánchez, presidente de la Liga Nacional, cada club deberá asumir el costo de las pruebas.
Precios elevados
La opción que se acomoda más al presupuesto de los clubes, pero que tiene un 85 por ciento de confiabilidad, es la de antígeno, que en los laboratorios clínicos autorizados tiene un costo entre Q340 y Q640.
Esta se efectúa por hisopado nasofaríngeo y se utiliza para la detección cualitativa de antígenos específicos para SARS CoV-2; el positivo no significa que el virus esté activo.
Si esta fuera la elección final, cada equipo debería hacer una inversión de Q13 mil 600 para cada ronda de controles.
La más fiable, con un 99 por ciento de confiabilidad, es la PCR; su precio varía de Q2 mil 500 a Q3 mil 200. Con esta alternativa el gasto aumentaría considerablemente, unos Q100 mil por ronda para cada club.
El costo total podría incrementarse incluso más, pues según el protocolo, después de la primera ronda de pruebas deberá transcurrir una semana para que estas se vuelvan a practicar a todos los involucrados, por lo que cada equipo necesitaría invertir de Q27 mil 200 hasta Q200 mil cada 15 días, según el tipo de control.
¿Qué sigue?
Los resultados se conocerían 24 o 48 horas después, y una vez se cumpla con ese paso vital para el retorno, los planteles regresarían a entrenar a las canchas en cuatro grupos de seis jugadores, con las medidas requeridas y horarios diferentes.
En caso de que el resultado del jugador sea negativo, podría regresar de manera inmediata a las prácticas, siguiendo el protocolo de prevención, con control de síntomas médicos. Después de una semana, volvería a ser sometido a otra prueba.
Si el resultado es positivo, la primera medida que se aplicará será el aislamiento. “Seguir el tratamiento y control a las personas con quienes convive”, indica el protocolo. A los 14 días se le repetirá la prueba y si vuelve a dar positivo se retoma el proceso; si es negativo, podrá volver a entrenar.
Durante las sesiones de entrenamiento solo podrán estar presentes los jugadores que sean citados, además del cuerpo técnico, personal de apoyo médico, encargados de utilería y de prensa, directivos y personal administrativo.
Aunque la fecha exacta del regreso no está definida, el próximo domingo se conocerá el sistema de alertas que implementará el Gobierno para retomar actividades.
Sobre esto, en una reunión sostenida entre dirigentes de la Liga Nacional y el director de la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia Covid-19, Edwin Asturias, el titular de dicha instancia aseguró que el futbol guatemalteco recibirá una grata “sorpresa”, aunque no dio detalles al respecto.