“Aunque los síntomas más severos (fiebre alta) han disminuido, siento una fatiga enorme y una tos residual que no desaparece. Cualquier actividad física, como caminar, me deja exhausto durante horas”, añadió.
Van der Burgh piensa en los participantes en los Juegos y afirma que “la pérdida de condición física ha sido brutal y solo puedo pensar en los atletas que pueden contraer Covid-19. Tener esta infección tan cerca de los Juegos es lo peor. Los atletas continuarán entrenando, ya que no hay una decisión sobre los Juegos y continuarán exponiéndose a riesgos innecesarios”, advirtió.
“La salud es lo primero y Covid-19 no es broma”, advierte el excampeón olímpico.