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Quetzal-1 ya está en la Estación Espacial Internacional

Quetzal-1, el primer satélite guatemalteco, que fue transportado al espacio el sábado 6 de marzo, llegó el lunes por la mañana a la Estación Espacial Internacional (EEI), desde donde será puesto en órbita en abril o mayo.

En un video que compartió la Nasa en su cuenta de YouTube, se observa el acercamiento de la cápsula Dragon, dentro de la cual viajó Quetzal-1, que fue impulsada por el cohete Falcon 9, de la empresa Space X, a escasos metros de EEI, ubicada a 400 km de la superficie terrestre. Luego, se puede ver cómo un brazo robótico se extiende para asir la cápsula y acoplarla a la EEI.

El primer satélite guatemalteco, desarrollado por estudiantes, docentes e investigadores de la Universidad del Valle de Guatemala, desde el 2014, viajó a 23 mil km por hora como carga en la misión CRS-20, de la empresa Space X, contratada por la Nasa para estos viajes, en la que entregó a la EEI 4 mil 500 libras de provisiones y materiales que se utilizarán en experimentos científicos.

Luis Zea, uno de los dos codirectores del Proyecto CubeSat, viajó a Cabo Cañaveral, Florida, Estados Unidos, junto a 11 compañeros más, quienes también participaron en la creación del proyecto. Los guatemaltecos pudieron observar de cerca el traslado de Quetzal-1 en uno de los famosos edificios de la Nasa. En total, fueron cien las personas involucradas en el proyecto.

Quetzal-1 es el primer paso para la exploración espacial

Zea indicó que luego del arribo de Dragon a la EEI se comenzará a descargar el material orgánico que es más vulnerable, para luego continuar con las provisiones para los astronautas que habitan la EEI.

Qué sigue

El satélite permanecerá en el J-SSOD, dentro del módulo experimental Kibo, de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa), por aproximadamente dos meses, hasta que se programe su puesta en órbita.

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El J-SSOD se instalará en la plataforma experimental que se colocará en la mesa deslizante del airlock de Kibo, pequeño cuarto que permite que los objetos pasen entre lugares a diferente presión. El J-SSOD y la plataforma se transfieren al exterior. Luego, el brazo robótico de Kibo los lleva hasta el punto de liberación al espacio. Después de ser puesto en órbita, el interruptor del CubeSat se liberará y se activará su operación. Treinta minutos después, se iniciará el despliegue de sus cuatro antenas y enviará una señal a la Tierra.

La misión científica del satélite es probar un sensor óptico compuesto de una cámara monocromática, un motor piezoeléctrico y un carrusel de filtros, para establecer la concentración de clorofila en cuerpos de agua.