Lo anterior lo dijo Giammattei durante una visita a la cárcel de Cantel, donde surge el 47 por ciento de llamadas de extorsión en Guatemala, como parte de las actividades del primer Gabinete de Puertas Abiertas en Quetzaltenango.
De acuerdo con el gobernante, este personal está preparado, completó un entrenamiento y fue evaluado con el apoyo del gobierno de Estados Unidos. Sobre la responsabilidad de autoridades en el ingreso de ilícitos a las cárceles, Giammattei dijo que, en el caso de Cantel, a raíz de una requisa reciente, el Ministerio Público (MP) sumó indicios que le pueden permitir deducir responsabilidades.
Dijo que la prisión tiene ahora dos mil 513 reos y solo 813 planchas para dormir. El hacinamiento, agregó, llega a 300 por ciento y pone en riesgo la seguridad de la cárcel y de los alrededores.
Como parte de las acciones en Cantel, Giammattei dijo que la próxima semana deberá estar habilitado un sector solo para los imitadores -extorsionistas que se hacen pasar por pandilleros para intimidar a sus víctimas-, donde solo habrá una única luz, sin tomacorrientes y con una antena bloqueadora de señal para que no puedan sacar llamadas.
Giammattei dijo que los bloqueadores de señal en Cantel no funcionan, sino solo en algunos sectores de esa cárcel.
En ese contexto, comentó que las telefónicas invirtieron US$3 millones hace siete u ocho años para instalar bloqueadores de señal en las cárceles y una empresa al parecer hondureña tiene a su cargo el mantenimiento, por lo cual cobra entre US$40 mil y US$50 mil a esas compañías. Giammattei insistió en que las antenas no están funcionando y anunció que solicitará a las telefónicas que enmienden el asunto o de lo contrario prohibirá, mediante un acuerdo gubernativo, la instalación de antenas del servicio telefónico cerca de las cárceles.
Manuel Sisniega, director de asuntos corporativos de Tigo, dijo la compañía tiene disposición de coadyuvar con las autoridades, pero es necesario que se garantice la integridad de los equipos de bloqueo y que la coordinación para realizar los mantenimientos sea aprobada por el Sistema Penitenciario. “Hay varias razones por las que podrían estarse generando llamadas, incluyendo la posibilidad de que hayan cables que ingresen del exterior del centro carcelario y permitan tener señal wifi utilizando routers o modems. Trabajaremos de la mano con las autoridades para coordinar el óptimo funcionamiento de los equipos y evaluar opciones para permitir el pronto restablecimiento del funcionamiento cuando haya algún desperfecto“, afirmó.
Trabajo
Giammattei anunció que en el Centro de Orientación Femenina (COF), la cárcel preventiva para mujeres de la capital, iniciará un programa que se replicará a nivel nacional para que los internos trabajen para tener comida.
Explicó que las mujeres del COF harán la ropa de cama, batas y demás implementos para los hospitales públicos.
El programa no será obligatorio, según Giammattei, pero quien no acceda a trabajar será trasladado a un sector donde, aseguró, no tendrá privilegios ni visita conyugal.
Para Giammattei, de esta forma se podrá obtener recursos del presupuesto de Q500 millones del Sistema Penitenciario para, por ejemplo, construir un segundo piso para área administrativa en Cantel, cuyo proyecto data de 2006, cuando él fue director de Presidios, pero quedó en el olvido.
Menos reos
El presidente señaló además que buscará con la Corte Suprema de Justicia (CSJ) habilitar el control telemático y grilletes para evitar la prisión preventiva, sobre lo cual insistió en que Guatemala hay un abuso de esa medida de coerción.
Otras medidas, mencionó, son que haya reos que puedan salir de las cárceles para trabajar y retornen de noche a la cárcel. Esto aplicaría para delitos menores o quienes ya estén cerca de cumplir condena.