En la primera conferencia de Prensa después del Ataque, Trump dijo que pedirá a la OTAN que se involucre más en Medio Oriente, además agregó que Estados Unidos no depende del petróleo de Irán.
“Ningún estadounidense sufrió daños en el ataque de anoche. No hemos sufrido bajas mortales”, resaltó Trump.
Un total de 22 misiles balísticos cayeron el lunes sobre las bases de Ain al-Assad (oeste) y Erbil (norte), donde están estacionados algunos de los 5 mil 200 soldados estadounidenses desplegados en Irak.
Irán se ha atribuido la responsabilidad de los ataques con misiles en represalia por la muerte del poderoso general Qasem Soleimani, arquitecto de la estrategia iraní en Medio Oriente, en una ofensiva con drones estadounidenses en Bagdad la semana pasada.