Guatemala

Juez aplaza hasta febrero la revisión de medidas de Blanca Stalling

La magistrada separada de la Corte Suprema de Justicia compareció en el Juzgado Décimo Penal, a cargo de Víctor Cruz, para repetir una audiencia en donde fue favorecida con arresto domiciliario.

Blanca Stalling, magistrada separada de la CSJ, compareció junto con su abogada al Juzgado Décimo Penal. (Foto Prensa Libre: Erick Avila)

Blanca Stalling, magistrada separada de la CSJ, compareció junto con su abogada al Juzgado Décimo Penal. (Foto Prensa Libre: Erick Avila)

Víctor Hugo Cruz Rivera, titular del Juzgado Décimo Penal, aplazó la repetición de una audiencia que había sido anulada y en la cual se dictó la libertad condicional a Blanca Aída Stalling Dávila, magistrada separada de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).


El argumento del juzgador, que fue nombrado el mes pasado en la judicatura, fue la carga laboral -tiene audiencias programadas hasta mayo del 2019- y el comienzo de las vacaciones para los jueces, los magistrados y el personal del Organismo Judicial (OJ).

Será hasta el 6 de febrero del 2019 cuando se repita la audiencia de revisión de medidas sustitutivas, informó el juez Cruz Rivera durante una audiencia a la que comparecieron representantes del Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).

Stalling Dávila fue beneficiada con arresto domiciliario sin pago de fianza por la suplente Abelina Cruz Toscano durante una audiencia sorpresiva y sin acceso al público y periodistas el 16 de agosto del 2018.

La audiencia se programó para que se revise el proceso y si es necesario, revocar la medida otorgada a favor de Stalling Dávila. En ese extremo ella debería regresar a prisión.

Mandato de una sala

El ente investigador impugnó y la Sala Primera de Apelaciones Penal anuló la resolución el 28 de septiembre pasado y le ordenó al Juzgado Décimo Penal repetir la audiencia. El argumento de Stalling se centró en supuestos quebrantos de salud.

El juez Décimo Víctor Cruz realizará la audiencia de revisión en 2019. (Foto Prensa Libre: Erick Avila)

La funcionaria fue acusada por el MP y la Cicig de tráfico de influencias por haber presionado al juez Carlos Giovanni Ruano para que beneficiara a su hijo Otto Fernando Molina Stalling con arresto domiciliar cuando estaba por enfrentar un debate en el caso IGSS-Pisa-Chiquimula -fue condenado a seis años de prisión y con libertad condicional por el Tribunal Undécimo Penal-.

De juzgado en juzgado

En total, la etapa intermedia ha sido interrumpida en seis ocasiones; el caso ha pasado por cuatro juzgado diferentes, debido a varios recursos interpuestos por la magistrada y excusas presentadas por los togados.

Inicialmente el caso fue designado al Juzgado Séptimo de Primera Instancia Penal, a cargo de Adrián Rodríguez, pero Stalling lo recusó por dudar de su imparcialidad y esto llevó al juez a inhibirse.

Luego, el caso pasó al Juzgado Octavo, a cargo del juez suplente José Alvarado. No obstante, Stalling logró separarlo del caso alegando que mantiene una amistad con él y que había fotografías de ambos juntos.

El expediente pasó a manos de la jueza Silvia Morales, titular del Juzgado Noveno. Sin embargo, ella se inhibió aduciendo que dudaban de su imparcialidad.

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