Ellos demandan mejores salarios, pues quienes son contratado para trabajar ocho horas en la categoría de Profesional I -muchos de ellos médicos generales-, tiene un sueldo base que ronda los Q3 mil 200, quienes logran una plaza de Profesional II, ya con especialidad, llegan a los Q3 mil 500, y si es Profesional III, Q3 mil 700.
“Son tecnicismos de Onsec, este no es un escalafón, pues hay especialistas que se han preparado en otro país y tienen plaza de Profesional I, porque era la única que estaba disponible. No hay escalafón como tal”, indica el médico Arnoldo López, del Hospital Roosevelt.
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Con varios bonos, entre ellos el de antigüedad, logran devengar entre Q7 mil a Q15 mil, pero para llegar a esta última cifra, deben pasar entre 10 y 15 años de laborar en el Ministerio de Salud. Sin embargo, la mayoría de profesionales es contratada por jornadas de cuatro horas, y su sueldo base es de aproximadamente de Q1 mil 600.
En el caso de Leopoldo Mérida tiene un contrato de ocho horas como Profesional III en el Hospital San Juan de Dios. Él es cirujano toráxico, se especializó en Inglaterra y Estados Unidos, y devenga alrededor de Q18 mil, pero lleva laborando 38 años en el Hospital General. Indica que es el único que ve los problemas toráxicos del nosocomio, en el área de adultos.
“Aguantamos porque nos apasiona el trabajo y el servir a las personas, pues los salarios siempre han sido bajos”, indica.
El traumatólogo Sergio Alvarado señala que no hay una carrera administrativa, otra de las demandas que los médicos hacen al Ministerio de Salud. “Con el sueldo que uno ingresa al ministerio, con ese mismo sueldo se jubila o se muere en el trabajo”. Refiere, además, que no hay ningún incentivo para quienes estudian una especialidad, pues la remuneración seguirá siendo la misma, lo que sí aumenta, es la responsabilidad al tratar a los pacientes.
Otros ganan más
Contrario a lo que gana un médico en el sistema de salud nacional, en otras entidades del Estado hay empleados que ganan sumas mayores, con menores responsabilidades y sin un grado académico elevado.
En el Congreso de la República, un conserje I contratado en el renglón 011, puede llegar a tener un sueldo Q21 mil, por realizar labores de limpieza. Mientras que un ujier, cuya labor es atender a un diputado dentro del Hemiciclo, puede llegar a recibir mensualmente cerca de Q15 mil, lo que un médico recibe después de laborar más de 20 años en el servicio de salud pública.
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Dentro del Ministerio de Educación también hay mejores salarios que los devengados por el gremio de médicos. Un maestro con escalafón F, el más alto, gana Q8 mil 203.50, por una jornada laboral que no requiere de un título universitario para desempeñarlo. Un docente en escalafón A devenga Q3 mil 646, que casi iguala lo que tiene como sueldo base un facultativo contratado como Profesional III.
Astrid Tello, miembro de la asamblea de médicos, menciona que esta situación de los salarios desiguales se resolvería con la aprobación de la Carrera Administrativa del Profesional de la Salud Pública, que permitiría el incremento salarial por escalafón, no solo por el tiempo sino por la capacidad de los profesionales. Esa es una de las peticiones que el gremio presentó al Ministro de Salud, como parte de la dignificación salarial, un tema que se trabaja desde la administración de la exministra Lucrecia Hernández Mack.
Fue el 1 de junio pasado que en asamblea nacional, el gremio se reunió y determinó que pelearían por una tabla en base a salarios mínimos, según Tello. En esa ocasión se acordó que se restringirían las consultas externas como medida de presión, lo cual se concretó el 13 de agosto, luego que el ofrecimiento del actual ministro, Carlos Soto, de un bono único de Q2 mil que sería pagado en diciembre, no llenara las exigencias de los médicos.
El bono aumentó a Q4 mil, pero los profesionales no están satisfechos y este miércoles presentarán una contrapropuesta que será discutida en el Congreso de la República.
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