La audiencia se llevó a cabo a las 14 horas locales (12 horas de Guatemala) ante el juez Robert Patterson, en los tribunales federales situados en el sur de Manhattan, confirmó la portavoz de la fiscalía.
Acompañado por un equipo de cinco abogados, Portillo -vestido con saco gris oscuro, camisa blanca y corbata color violeta- se mostró tranquilo durante la breve audiencia de menos de media hora efectuada en los tribunales federales situados en el sur de Manhattan.
Uno de sus letrados, David Rosenfield, anunció al juez que su equipo presentará en “diez días o dos semanas” un paquete de fianza para tratar de obtener la liberación de su cliente durante el juicio.
“Cuando lo tengamos listo pediremos una fecha de audiencia. Tenemos que preparar el monto, la propuesta del paquete que ofreceremos. Confiamos en que el juez lo acepte“, dijo Rosenfield al final de la audiencia.
Extraditado el viernes pasado desde Guatemala, el expresidente guatemalteco, de 61 años, se encuentra alojado en el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York.
Se trata del primer exgobernante latinoamericano en ser entregado a la justicia de Estados Unidos. El delito del que se lo acusa es castigado con una pena máxima de 20 años de prisión, según la legislación estadounidense.
La fecha de inicio del juicio aún no fue establecida. Según los abogados de Portillo, sería de aquí a “por lo menos un año“.
Delitos que se le imputan
Portillo está acusado del delito de conspiración para lavar 70 millones de dólares (Q560 millones) en bancos norteamericanos durante su gestión, entre los que destacan 1.5 millones de dólares (Q12 millones) donados por Taiwán para proyectos para la niñez, según la fiscalía.
Se trata del primer exgobernante latinoamericano en ser entregado a la justicia de Estados Unidos. El delito del que se lo acusa es castigado con una pena máxima de 20 años de prisión, según la legislación estadounidense.
Portillo calificó su extradición como un “secuestro” y acusó al gobierno del presidente Otto Pérez de “violar la ley”, pues, según dijo, aún tenía recursos pendientes en los juzgados guatemaltecos.
Pero Otto Pérez rechazó el lunes esa denuncia y aseguró que el exmandatario “no tenía ningún proceso pendiente” en su país.
Portillo denunció además que era extraditado a pesar de sufrir varios problemas de salud, entre ellos una arritmia cardiaca.
En ese sentido, el cónsul guatemalteco en Nueva York, Oscar Padilla, ha indicado que se encuentra en “comunicación permanente” con las autoridades estadounidenses e hizo una visita al centro correccional ayer.
Consulado le brinda asistencia
“El Consulado General de Guatemala en Nueva York brindará la asistencia y protección consular que como ciudadano guatemalteco corresponde al expresidente Alfonso Antonio Portillo Cabrera, velará por su bienestar y el respeto al debido proceso”, dijo la cancillería en un comunicado.
El Gobierno guatemalteco afirmó haber solicitado a las autoridades estadounidenses que se le entregue por escrito “el resultado de la evaluación médica” del expresidente.
Portillo había presentado varios recursos para evitar su extradición, aprobada en noviembre de 2011 por el expresidente Álvaro Colom (2008-2012).
Había sido capturado cuando intentaba abandonar el país de forma ilegal, rumbo a Belice, el 26 de enero de 2010, un día después de emitida la petición de extradición por una corte de Nueva York.
Portillo había sido absuelto en 2011 en tribunales guatemaltecos por el supuesto desfalco de unos 15 millones de dólares (Q120 millones) en el ministerio de la Defensa en 2001, pero no recobró su liberad debido a la petición estadounidense.