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De acuerdo con este terapeuta, para llegar a las últimas dos fases se vuelven indispensables las experiencias significativas, la comprensión y la comunicación, ya que la mayoría de parejas rompe vínculos en alguna de las tres primeras etapas.
“El tiempo y la convivencia son importantes para determinar si quiero seguir en una relación o no. Por ejemplo, un noviazgo de un mes no será igual a uno de tres años. Es probable que el último ya haya superado varias crisis, mientras que el primero aún está en lo que llamamos luna de miel, donde todo parece perfecto”, dice la psicóloga Pamela Juárez, quien agrega que son las primeras peleas y discusiones las que pueden causar el rompimiento.
A criterio de Juárez, no hay una receta mágica para lograr que una relación sea duradera y exitosa, pues entran en juego muchos factores, como la madurez, los objetivos de vida, la compatibilidad de intereses, la confianza y la comunicación. “También debemos considerar la experiencia previa de la pareja, puesto que algunas personas ya saben qué quieren de un noviazgo o un matrimonio, mientras que otras aún están conociéndose y aprendiendo”, agrega.
De película
Un error común es idealizar el amor y creer que todas las relaciones son perfectas y de película, con comienzos espectaculares y finales felices. Para el psicoterapeuta Enrique Gramajo, los grandes problemas en los noviazgos ocurren por la falta de autoconocimiento y por la carencia de amor propio.
“Nuestro primer objetivo debe ser amarnos a nosotros mismos. Es decir, aceptarnos y valorarnos como seres humanos. Tenemos que vernos al espejo y aceptarnos con virtudes y defectos”, explica Gramajo, quien agrega que también debemos aprender a controlar nuestros miedos y temores.
Si después de hacer un análisis interior sobre cómo está nuestra salud emocional, decidimos tener una relación de pareja, el siguiente paso es establecer normas claras y llegar a acuerdos. “Tenemos que ser honestos con la otra persona y decirle qué buscamos ahora que estamos juntos. La comunicación y la honestidad son importantes para reducir al máximo los conflictos”, asegura Gramajo.
Otro aspecto fundamental, según Juárez, es que no debemos huir de los problemas. “Las relaciones afectivas, de cualquier tipo, son muy complejas, por lo que siempre ocurrirán desacuerdos y conflictos, pero no debemos evitarlos u obviarlos, sino encararlos y tratar de solucionarlos de la mejor manera”, enfatiza la psicóloga.
Así que si usted está en una relación o piensa establecer una en el futuro, en esta edición enumeramos siete actividades que usted puede efectuar con su pareja para reducir los problemas, fortalecer los vínculos y llegar a la quinta etapa del amor: la conexión profunda.
1. Planificar viajes
El presupuesto no debe ser una limitante, ya que los viajes pueden ser a lugares cercanos al hogar, como parques o bosques. “También sería bueno plantearse una meta a largo plazo para tener un objetivo en común: ahorrar dinero para visitar algún país”, dice el psicoterapeuta Enrique Gramajo, quien agrega que lo ideal es que la salida sea a solas, por lo que si ya tienen hijos, se le puede pedir a un familiar que los cuide algunas horas.
En el caso de las salidas al extranjero, los pequeños deben acompañar a sus padres, pero siempre hay que encontrar un momento a solas, ya que el objetivo es convivir y conocerse más como pareja. Una recomendación importante es olvidarse de las redes sociales y del trabajo. “Tratemos de dejar a un lado el teléfono celular y utilizarlo lo menos posible. Ese viaje, sin importar si es largo o corto, debe lograr que la pareja se conecte y hable, sin que la agitada rutina intervenga”, aclara la psicóloga Pamela Juárez.
2. Adoptar una mascota
Actualmente, la adopción de mascotas está muy de moda y se cumplen dos objetivos: darle otra oportunidad a un ser vivo que lo necesita y adquirir el compromiso conjunto de cuidar al animalito. Según Juárez, lo importante es hablarlo y tomar la decisión en pareja, para que ambos opinen sobre qué tipo de mascota quieren y cómo se dividirán las labores de su cuidado.
“Si es necesario, hay que escribir las responsabilidades y horarios de cada uno. Por ejemplo, quién debe bañarla, quién debe llevarla al veterinario y quién debe darle comida. Lo ideal es que ambos hagan las tareas, pero si no se puede, por lo menos, que los dos la saquen de paseo, si la mascota elegida necesita esa actividad física”, agrega.
3. Cocinar juntos
En este punto, los expertos recomiendan que no sea una comida convencional, sino que debe ser algo planificado, para que exista comunicación y acuerdos mutuos. Por ejemplo, pueden pedirle a algún familiar que se haga cargo de los hijos, mientras la pareja cocina y cena. “La idea es que todo el proceso sea compartido, desde elegir las recetas hasta ir de compras”, aclara Gramajo.
Otro punto importante es el ambiente del lugar. Aunque sea en el hogar, se puede decorar con flores, aromatizar con incienso, poner música y encender algunas velas para darle un toque más romántico. “Tampoco debe ser algo recurrente y que esto se convierta en rutina. Puede ser una cena cada dos o tres meses”, aconseja el experto.
4. Leer un mismo libro
“Como terapia de pareja, a veces utilizo una técnica que ayuda mucho. Yo le llamo ‘club de lectura para dos’”, dice Juárez. Se trata de que ambos lean el mismo libro y luego hagan una cita para comentar qué les pareció y encuentren aspectos en común.
“De esta manera, recordaremos cuáles son los gustos de mi pareja, pero sobre todo, reconocemos sus juicios e intereses”, explica la psicóloga, quien agrega que las discusiones que exigen un nivel intelectual elevado son perfectas para demostrarle a la pareja que hay admiración mutua.
5. Mensajes de afecto
Los gestos y las palabras de afecto son comunes al principio de una relación, pero son acciones que se pierden conforme pasa el tiempo. Retomar los mensajes de amor también es una manera de fortalecer la relación. Gramajo sugiere no hacerlo a través de las redes sociales o la tecnología, sino que se debe escribir una carta o hacer una tarjeta y acompañarla de un chocolate. “Tanto las palabras como los obsequios sencillos le demostrarán a nuestra pareja que nos interesa y que siempre vamos a seguir con el juego del enamoramiento”, añade el psicoterapeuta.
6. Actividad física
Más allá de los beneficios para la salud, practicar actividad física en pareja estrechará los lazos afectivos, pues ambos se plantearán una meta en común. Además, si por algún motivo uno de los dos se siente desmotivado o cansando, el otro tiene la responsabilidad de darle ánimos.
7. Aprender algo diferente
Cuando ya somos adultos y tenemos una familia, pocas veces pensamos en nuestro crecimiento integral. Por eso, las parejas deben aprender cosas diferentes. “Yo recomiendo que se inscriban a un curso de cocina o de arte. La idea es que sea una disciplina que los dos desconozcan, para que así aprendan al mismo tiempo”, afirma Juárez.
La psicóloga recomienda que el taller o curso sea de corta duración, para que no interfiera con el trabajo o las asignaciones personales de cada uno.
Detalles inesperados
Existen muchas actividades que pueden fortalecer el amor de la pareja, pero se pueden volver parte de la rutina. Para evitar esta situación, la psicóloga Karen Cruz recomienda implementar un plan sorpresa en el que nunca falten los detalles inesperados. Estos pueden ser:
- Un ramo de flores sin ningún motivo o fecha especial.
- Un mensaje de voz o de texto fuera del horario normal en el que nos comunicamos con la pareja.
- Llevar el desayuno a la cama un fin de semana.
- Implementar juegos en la vida íntima.
- Salir al cine.
- Adelantar el regalo de cumpleaños.
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