Este tribunal se ocupa normalmente de casos e espionaje y otros relacionados con el contrabando, la blasfemia y los intentos de derrocar al régimen iraní.
Las recientes declaraciones de Irán, avivaron el interés del gobierno de Donald Trump por recuperar información de este exagente del FBI que desapareció en 2007. Trump ofreció US$20 millones a cambio de información y tuiteó que sería un paso “positivo” si Irán entrega al exagente.
“Si Irán es capaz de entregar al ex agente del FBI Robert A. Levinson, secuestrado en Estados Unidos y desaparecido en Irán desde hace 12 años, sería un paso muy positivo”, dijo Trump en Twitter.
If Iran is able to turn over to the U.S. kidnapped former FBI Agent Robert A. Levinson, who has been missing in Iran for 12 years, it would be a very positive step. At the same time, upon information & belief, Iran is, & has been, enriching uranium. THAT WOULD BE A VERY BAD STEP!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 11, 2019
Levinson desapareció mientras estaba en una misión no autorizada de la CIA cuando se encontraba en la isla iraní de Kish el 9 de marzo de 2007.
Era un meticuloso investigador del FBI que se le atribuye haber detenido a mafiosos rusos e italianos. Durante su desaparición trabajaba para una empresa privada.
Durante años, los funcionarios estadounidenses se dedicaron a decir esta versión del trabajo de Levinson, pero en 2013, medios internacionales revelaron que en realidad estaba en una misión para analistas de la CIA que no tenían autoridad de llevar a cabo operaciones de espionaje.
Desde su desaparición, las únicas fotos y videos del investigador aparecieron en 2010 y 2011, se le veía con una apariencia demacrada, barbudo y con el pelo largo, vestía también un traje naranja parecido al que utilizaban los prisioneros de Guantánamo.
Durante años, los rumores sobre él han circulado pero una versión asegura que fue encerrado en una prisión de Teherán, dirigida por la Guardia Revolucionaria paramilitar de Irán.