Al menos mil personas han sido detenidas en diferentes ciudades de Irán por haber participado en estas protestas y haber creado disturbios, según informaron autoridades locales a varios medios del país.
Según el ministerio del Interior, no se ha otorgado ningún permiso para convocar manifestaciones por lo que las autoridades del país consideran que “son ilegales”.
Además, las autoridades de Irán amenazaron a los manifestantes con acusarlos de delitos, algunos de ellos castigados con la pena de muerte.
En tanto, la embajadora estadounidense en la ONU, Nikki Haley, dijo este martes que Washington pedirá la realización de una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad sobre las protestas en Irán.
“La ONU debe pronunciarse en los próximos días, llamaremos a una sesión de emergencia”, dijo la diplomática estadounidense. “La gente de Irán está clamando por libertad”, agregó.
Los conservadores de Estados Unidos han expresado rápidamente su fuerte apoyo al movimiento de protesta surgido la última semana en Irán, en gran parte como muestra de su repudio al intento de acercamiento del gobierno de Barack Obama al régimen iraní.
En el Congreso, donde la mayoría republicana ha denunciado el acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní alcanzado en 2015, los halcones antiiraníes fueron los primeros en dar la bienvenida -desde el fin de semana- a los acontecimientos en sus comunicados y tuits.
En tanto, trascendió que el gobierno de Trump baraja imponer sanciones al gobierno iraní.
ONU está preocupada
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó su “pesar” por el número de muertos en las protestas contra el gobierno en Irán, y llamó a la república islámica a respetar los derechos de los manifestantes pacíficos.
Teherán aseguró que 21 personas han muerto en los enfrentamientos en el país mientras miles de manifestantes tomaban las calles.
“Lamentamos la pérdida de vidas humanas y esperamos que no haya más violencia. Esperamos que los derechos de reunión pacífica y expresión del pueblo iraní sean respetados”, dijo el portavoz de Guterres, Farhan Aziz Haq, en nombre del secretario general.
En la quinta noche de enfrentamientos, en la noche del lunes al martes, seis personas murieron en un ataque a una comisaría de policía en la provincia céntrica de Isfahan, según la televisión estatal.