De acuerdo con el informe, entre los deportados de 2014 figuran 30 mil 75 hombres, 4 mil 263 mujeres y 118 menores.
El aumento de las deportaciones ocurre en medio de una crisis humanitaria por la migración de miles de menores sin acompañante adulto, la mayoría de Guatemala, El Salvador y Honduras, a quienes Washington anunció expulsará de su territorio.
Datos oficiales indican que desde octubre pasado unos 57 mil menores sin compañía de adultos, la mayoría de estos tres países centroamericanos, fueron interceptados cuando ingresaban clandestinamente a Estados Unidos en busca de sus familiares o huyendo de la violencia en sus países.
A pesar del incremento en las deportaciones, Guatemala reportó un ingreso de 2 mil 703.9 millones de dólares en remesas familiares durante el primer semestre de 2014, un crecimiento de 9.09 por ciento en relación con el mismo período de 2013, cuando ingresaron USD 2 mil 478 millones.
De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), alrededor de 1.5 millones de guatemaltecos viven en el extranjero. De ellos, 1.3 millones en Estados Unidos, gran parte de los cuales carecen de residencia legal.
En todo el año pasado, las autoridades estadounidenses deportaron a 50 mil 221 guatemaltecos, un récord que superó en unas 10 mil personas a los expulsados en 2012.
