Al llegar a la zona 1 ya era de madrugada, pero todo cambió en la 2a avenida y 8a calle, donde la ambulancia fue chocada por un automóvil, cuyo piloto manejaba en estado de ebriedad.
Del impacto, la paciente salió expulsada por una de las ventanas de la ambulancia y quedó a unos 15 metros de la unidad.
Narra experiencia
“Al momento del choque escuché un estruendo y gritos, luego no recuerdo que pasó, pues quedé tirada inconsciente a media calle”, relata Sonia, quien agregó que reaccionó cuando ya estaba en el Hospital San Juan de Dios.
Recuerda que el dolor era mucho y se cayó al tratar de acomodarse en la camilla, “pasé dos meses con mucho dolor, se me dificultaba movilizarme. Un pie se me hinchó”, manifiesta.
La paciente recuerda que fue sometida a diversos exámenes y el diagnóstico fue que tenía varios golpes y se descartaron fracturas, aunque le dijeron que sufría de hemorragia interna.
Respecto del dolor en la vesícula, indicó que le recomendaron dieta para reducir la inflamación, pues por los golpes sufridos sería complicada una operación.
Sonia relata que sus dolencias continúan; además, cuando escupe expulsa restos de sangre y afirma que el dolor persiste en el pulmón izquierdo, desde el día del accidente.
Sin trabajo
Agrega que carece de recursos para comprar medicina, sumado a esto, en noviembre último entregó el cuarto que alquilaba junto a sus hijos menores, pues debido al accidente reposó varios días y fue despedida de su trabajo.
Actualmente no tiene trabajo fijo, por lo que se dedica a lavar ropa ajena y a acarrear leña para agenciarse de fondos.
Una hermana le da donde vivir a ella y sus cinco hijos, pues Sonia es madre soltera y su situación económica se ha complicado, por lo que dos de sus hijas trabajan en oficios domésticos para contribuir en la economía del hogar.
Si alguien desea ayudar a esta persona, se puede comunicar al número 5928 7020 y preguntar por Sonia Pérez.