Actualiza el estado de uno de los perfiles que maneja en Facebook. “¿Puede alguien recomendarme una película?”, pregunta. Después, abre otro perfil: “Tan sólo querría estar durmiendo toda la tarde”. Y un tercero: “Tengo mucha hambre”. Intercala esos textos con otros en los que apoya a políticos brasileños.
BBC NEWS MUNDO
Exclusivo BBC: la investigación que revela el ejército de perfiles falsos usados para influir en las elecciones de Brasil
Son las siete de la mañana y un joven de 18 años enciende la computadora en su casa de Espíritu Santo, en el sureste de Brasil. Comienza su rutina laboral.
Los 20 perfiles que controlaba en Facebook y Twitter no incluían ni su foto ni su nombre real; fueron alimentados con videos inventados y fotos robadas, y, usados, según él,activamente para influenciar, como un ejército virtual, el debate político en las redes sociales durante las elecciones presidenciales de Brasil de 2014.
Una investigación de tres meses de BBC Brasil encontró más de 100 perfiles supuestamente falsos en Facebook, pero sobre todo en Twitter, activos en Brasil desde 2012, que eran controlados por una suerte de cíborgs.
“Campaña negativa”
Los perfiles estaban en parte automatizados y en parte operados por humanos. Esa actividad humana rompe los patrones típicos vinculados a los bots (robots informáticos) y hace que su detección sea más difícil.
“Es un peligro para la democracia“, dice Philip Howard, del Instituto de Internet de Oxford, en Reino Unido.
“Las democracias funcionan bien cuando hay información precisa circulando en las redes sociales. Los cíborgs son parte de la técnica moderna de hacer campaña negativa”.
De acuerdo con cuatro personas que dicen haber trabajo para la empresa y fueron entrevistadas en condición de anonimato,a partir de 2012 un empresario brasileño contrató a unas 40 personas de diferentes partes del país para gestionar entre 20 y 50 cuentas falsas.
Todos los entrevistados declararon que trabajaban para Facemedia, una agencia de marketing que dice proporcionar servicios de monitoreo de redes sociales.
“Nosotros nunca creamos perfiles falsos, ese no es nuestro trabajo”, dice su propietario, Eduardo Trevisan.
El empresario ganó prominencia en Brasil con una cuenta de Twitter en la que alerta a sus 1,2 millones de seguidores sobre la ubicación de las operaciones policiales que buscan atrapar a conductores que sobrepasan el límite de consumo de alcohol.
Una rutina inventada
Varios elementos, concebidos con la ayuda de expertos, contribuyeron a que un perfil fuera identificado como falso.
El uso de fotos robadas (y a menudo manipuladas), el uso de herramientas externas, el tipo de mensajes que trataban de simular una rutina diaria, la repetición de palabras o expresiones, la publicación durante horas de trabajo, la participación activa en debates sociales, la acción para crear trending topics (temas tendencia) y los mensajes apoyando o atacando a candidatos.
“Teníamos que publicar dos veces al día en cada perfil. Cuando había un debate, lo comentábamos en tiempo real, como si fuéramos votantes. Tenía que hacer que esos perfiles tuvieran una rutina, una vida”, dice un supuesto exempleado.
“Eres alguien detrás de una máscara. Tienes una respuesta poderosa. Sientes que estás marcando la diferencia en esa campaña”, añade otro.
Las entrevistas y el análisis de la actividad en redes sociales de los perfiles falsos puso el foco en 14 políticos.
La investigación de BBC Brasil confirmó que hubo pagos legales a cuatro personas, incluida una transferencia de 360 mil reales (más de US$120.000) del comité nacional del Partido de la Social Democracia Brasileñal (PSDB), uno de los principales partidos de Brasil en 2014, cuando Aécio Neves, el candidato de la oposición, estaba en la carrera por la presidencia.
No hay pruebas que sostengan que los políticos conocían el uso de perfiles falsos como parte de los servicios en redes sociales aparentemente legales por los que pagaban.
Los pagos más recientes hallados por BBC Brasil provenían de la diputada federal de Río de Janeiro Laura Carneiro. Ella confirma haber contratado a Facemedia, pero niega tener conocimiento sobre “el uso inmoral de perfiles falsos”.
Algunos de esos perfiles falsos siguieron aportando “Me gusta” y comentarios en el perfil de Carneiro hasta noviembre de este año.
En el debate social
En un solo post sobre vacunas contra la rabia, cinco de los ocho comentarios fueron generados por cíborgs y todos ellos fueron publicados en apenas unos minutos. “Romulo Borges” escribió: “Súper importante”.
Tiene 71 amigos y comenzó a publicar en Facebook en marzo de este año, publicando cosas como”Esperando el momento para llegar a casa y comer restos de pizza” o”Lunes frío y lluvioso”, todas ellas desde Hootsuite, una plataforma externa que permite acceder a diferentes cuentas al mismo tiempo.
Borges tenía también un perfil en Twitter. Fue creado en 2010 y estuvo activo entre julio y octubre de 2014.
Cuando publicaba tuits sobre su rutina diaria, solía usar las mismas expresiones. En ese momento, publicó cosas sobre un debate entre la entonces presidenta (y luego sometida a un proceso dejuicio político) Dilma Rousseff y el opositor Neves.
En sus comentarios, criticó el comportamiento de Rousseff.
Borges suspendió sus actividades coincidiendo con el final de las eleccionesy regresó en marzo de 2017. Ahora sus “Me gusta” están en casi todos los posts(textos publicados en la red social) de Carneiro.
Los entrevistados dicen que los perfiles falsos que identificaron son apenas la punta del iceberg. Alegan que la compañía creó “miles” de cuentas supuestamente falsas. También dicen que hay otras empresas en Brasil que ofrecen los mismos servicios.
“Cuando analizamos la actividad de los perfiles falsos podemos ver claramente su recorrido interactuando entre ellas y con las cuentas de Twitter de Trevisan. Puedes ver los diferentes retuits, y cómo responden y comentan, tratando de promocionarse unas a otras en distintas redes”, explica Fábio Malini, coordinador de un grupo de investigación en la Universidad Federal de Espírito Santo.
Malini ya había estudiado algunos de los perfiles cuando fue contactado por BBC Brasil.
Tanto Facebook como Twitter dicen que los perfiles falsos van en contra de su política y que pretenden perfeccionar sus sistemas para detectar y, en última instancia, eliminar esas cuentas.
“Se benefician de lo que se conoce como comportamiento gregario, generando discusiones y creando la sensación de que un argumento específico a perdido o ganado el debate”, explica Malini.
De diez políticos que se cree que contrataron la empresa durante campañas electorales, solo tres de ellos ganaron. Los falsos perfiles fueron más exitosos a la hora de crear trending topics.
El trabajo “secreto” de los “activadores”
Un supuesto exempleado dice que algunos de ellos fueron contratados pensando que trabajarían para la famosa cuenta de Trevisan. “Era un tipo de trabajo muy secreto”, afirma.
Añade que cuando descubrió lo que estaba haciendo realmente, decidió ocultárselo a sus amigos y familiares. Hoy dice que le da miedo hablar sobre lo que hizo y que firmó un acuerdo de confidencialidad con la compañía: “Trabajé para gente muy importante”.
Los salarios eran bajos para los estándares de Brasil, apenas por encima del salario mínimo y duplicándolo durante la época de elecciones.
En otras regiones de Brasil, algunos trabajaban desde casa y eran monitoreados vía Skype. Cuando se levantaban para ir al baño, tenían que explicar su ausencia al coordinador.
Los más jóvenes y mayoritariamente menos cualificados eran llamados “activadores”, según las entrevistas. Recibían de sus superiores un informe detallado sobre cada una de las “personas” a las que tenían que representar: foto, historial familiar, profesión y aficiones.
Entonces, activaban el perfil y comenzaban a “alimentarlo” con publicaciones del día a día, antes de recibir instrucciones para ejecutar otras tareas. Todos tenían varias tarjetas SIM que les permitían verificar sus perfiles en las redes sociales.
Las fotos eran tomadas de bancos de imágenes, otras veces robadas de sitios de noticias y manipuladas. En un caso, usaron la imagen de una mujer víctima de asesinato.
Los posts más genéricos —”Buenos días”, “Voy a comprar comida”, “Buenas noches”, “Estoy muy cansada” y otros similares— eran casi siempre programados.
Una de las tareas era responder a comentarios de usuarios reales. Esto era especialmente importante para crear la sensación de que el perfil era auténtico.
Añadían y seguían a gente al azar para obtener un número creíble de “amigos”, lo cual ayudaba a forjar su “reputación”. Los perfiles falsos también interactuaban entre ellos (incluso había parejas y familiares inventados).
Cuando un perfil era desacreditado por los usuarios, se reemplazaba por otro, que usaban de un gran banco de perfiles falsos de la compañía, dicen los presuntos exempleados.
En torno a 25 de los perfiles hallados por BBC Brasil cesaron su actividad. Sus últimos posts y mensajes fueron publicados entre el 24 y el 27 de octubre de 2014.
La segunda ronda de las elecciones presidenciales en Brasil fue el día 26.
Durante uno o dos meses, los perfiles tuitearon únicamente sobre sus vidas, publicando textos similares para establecer una rutina y usando postsprogramados. Este patrón era roto a menudo con actividad muy intensa a favor de un candidato.
“Ganamos o bien por volumen, pues nuestro número de posts era considerablemente más alto que el que podía producir el público en general, o porque podíamos instigar a personas reales y hacer que activistas se implicaran en nuestra causa. Creamos una sensación de mayoría“, dice uno de los supuestos exempleados.
Formaban parte también de una campaña para la cuenta de Twitter de Trevisan que fue nominada para un premio.
Además, dijeron que participaron en votaciones online e incluso tuvieron en cuenta que la visión política opuesta les llevó ventaja por un tiempo para dar la impresión de que todo era “orgánico y natural”, en palabras de uno de ellos. “A veces, diez personas votaban durante ocho horas”.
Seguidores fieles
Hubo casos en los que políticos contrataron la empresa para cuidar su imagen fuera de las campañas.
Uno de ellos es el expresidente de Senado Federal de BrasilRenan Calheiros. Él niega haber contratado la compañía.
Pero en 2013, cuando hubo protestas que pedían su impeachment, los perfiles falsos crearon un hashtag (etiqueta), #MexeuComRenanMexeuComigo (si te metes con Renan, te metes conmigo) para defender al senador en las redes sociales.
Uno de sus defensores más leales, “Patrick Santino”, publicó tuits a favor de Calheiros que fueron compartidos 777 veces. La foto de su perfil es la del actor griego Sakis Rouvas.
En 2009, Trevisan fue invitado a participar en el programa matinal de televisión más famoso de Brasil. Se presentó como consultor de marketing y dijo que había sido entrenado por los gurús de Twitter detrás de la campaña del entonces presidente estadounidense, Barack Obama.
Si se demuestra que su empresa fue responsable de la creación de perfiles falsos para influir en el debate político en Brasil, Trevisan y alguno de sus empleados podrían verse envueltos en actividades que implican acciones legales, desde suplantación de identidad hasta fraude.
La nueva legislación que fue aprobada este año por el Congreso este año —y por lo tanto no aplicable en casos pasados— prohíbe el uso de perfiles falsos para promover campañas políticas durante las elecciones.
En detalle: ¿qué dice Eduardo Trevisan?
“Facemedia es una empresa de comunicaciones digitales que lleva diez años en el mercado. Durante este tiempo, hemos ofrecido servicios a más de 100 clientes. Nuestra empresa se especializa en planificación estratégica de marketing digital, creación y mantenimiento de sitios y perfiles, monitoreo de redes de big data, y varias técnicas de marketing como SEO, SEM, copywriting, branding, design thinkingyrelaciones con influencers, entre otras cosas”.
“Además de servir a una larga lista de clientes privados, Facemedia usa sus conocimientos en movilización digital para causas sociales. En 2011, por ejemplo, Facemedia recibió el “Premio Oscar en Twitter”, del diario estadounidense New York Times, por su labor humanitaria hacia personas que habían perdido sus casas por inundaciones. (…) Los vínculos entre los perfiles son establecidos a través de criterios de las propias redes sociales. Los servicios de Facemedia en campañas electorales son descritos y registrados de manera transparente. Por cuestiones éticas y contractuales, Facemedia no puede proporcionar ninguna información sobre clientes privados.