Al principio tomó el micrófono, saludó al público y a los presentes en la plataforma, y pidió aplausos para los artistas que elaboraron los barriletes.
En una segunda intervención, con algunos abucheos desde el público, Morales expresó: “El barrilete necesita tiempo (viento) en contra para poderse elevar. Así que la adversidad que tengamos de frente debe ser motivo para que nosotros podamos elevar el vuelo como nación”.
Agradeció la presencia de visitantes y habitantes para conmemorar el 118 aniversario de este festival y se fue con su esposa Patricia.
Luego del acto no dio declaraciones a la Prensa y se fue a Sumpango.
Hace apenas tres semanas, Morales fue abucheado a todo pulmón por aficionados en el Estadio Doroteo Guamuch durante el Clásico 300 que quedó 0-0.
Con información de Renato Melgar