Pero Heinze Sánchez, quien tenía mojada la espalda por la orina, analizó un poco la situación, luego de que “Enzo”, como lo llamó, regresara con él y comenzara a tratar de enmendar la travesura y crear una amistad.
Sánchez publicó en su página en Facebook su sentir. Pero asombró a muchos la decisión que había tomado. Tras el incidente con “Enzo”, Sánchez decidió adoptarlo.
Ahora, “Enzo” tiene un techo donde dormir y comer y por si fuera poco, hasta duerme con camiseta. “Enzo” dejó de ser un perro callejero para convertirse en un amigo fiel de Sánchez.
Sánchez ha comenzado a subir varios videos en YouTube de “Enzo” para compartir cómo ha cambiado la vida del perro, que continúa haciendo de las suyas, pero con un poco de entrenamiento, seguro se adoptará a su nueva vida.