El cerebro está dividido en dos estructuras que son llamadas hemisferios. Cada una está encargada de las diferentes funciones, ya sea cognitivas, sensoriales o motoras del ser humano.
El hemisferio derecho controla la parte izquierda del cuerpo, y el izquierdo, la derecha. Esto significa que en una persona diestra, el hemisferio izquierdo es el dominante, y por ello el ojo, oído, mano y pierna derechas de esa persona realizan sus funciones con mayor habilidad y eficacia que el ojo, oído, mano y pierna izquierdas. La situación opuesta ocurre con las personas zurdas.
Ambos hemisferios no maduran al mismo tiempo. Si bien la dominancia hemisférica es algo normal, cuando hay un grado más severo de debilidad en el hemisferio pasivo es cuando se pueden observar diferencias en aprendizaje, pensamiento y conducta, explica la psicóloga Ana Fajardo, directora de Madres y padres de niños con necesidades especiales (Mapaes).
Según estudios realizados en varios países, un niño con un hemisferio derecho débil puede presentar problemas de interacción social, falta de empatía, problemas de atención con o sin hiperactividad, impulsividad y problemas de coordinación motora, entre otras dificultades.
Fajardo añade que algunos de los diagnósticos relacionados con esa condición son déficit de atención con/sin hiperactividad, autismo, trastorno bipolar infantil, trastorno obsesivo compulsivo o problemas de conducta. Si por el contrario, el hemisferio izquierdo es el débil, el niño presentará problemas de aprendizaje, problemas del habla, motricidad fina pobre. Entre los diagnósticos relacionados con esta condición pueden estar dislexia, discalculia, disgrafia, discapacidad intelectual, dispraxias o apraxia del habla.
Tratamientos
Mediante la terapia neurosensorial es posible promover una mejor comunicación a nivel cerebral, debido a que se enfoca en trabajar con el hemisferio débil, una mejor maduración de este con el objetivo de disminuir las conductas inapropiadas y mejorar las dificultades anteriormente expuestas.
Cuando los padres notan algún tipo de diferencia en el desarrollo de sus hijos, deben buscar ayuda profesional lo antes posible, pues el tiempo es un factor importante en el pronóstico de esas condiciones.
Fuente: Mapaes, Tel. 4413-4150 mapaesgt@gmail.com