Según personal de la Beos, la pista tiene una longitud dos kilómetros, por 250 metros de ancho y fue localizada en una finca que no tiene nombre, en la zona colindante con territorio mexicano.
El final de la pista estaba cubierto con vegetación y árboles, para ocultar la aeronave blanca y azul, matrícula TG-NGI, la que se presume que por las condiciones del clima no había despegado.
En el lugar no se encontró a ninguna persona y aparentemente la avioneta ya había sido utilizada para efectuar ilícitos, debido a que después de una revisión no tenía los sillones traseros, solamente del piloto y copiloto, el cual habría sido arreglada para transportar hasta 300 paquetes de estupefacientes, según personal de la brigada.
Efectivos de la brigada instalaron un campamento para resguardar el lugar, mientras llegan expertos para verificar si la avioneta se encuentra en buen estado y así trasladarla a un hangar especial.
“Se procederá a la destrucción de la pista. Se continuará con los operativos terrestres y marítimos en la línea entre Petén y los estados mexicanos de Tabasco y Campeche, zonas que por la lejanía, son propicias para realizar actividades fuera de la ley, el hallazgo fue a 280 kilómetros de la cabecera departamental”, señaló una fuente de la Beos.