Nada más conocer la noticia del accidente, el obispo Francisco Cerro Chaves, acompañado por el vicario general, Diego Zambrano, y el secretario canciller, Antonio Chapado, se personaron en el lugar del accidente.
El prelado diocesano se ha puesto en contacto con la congregación para transmitir su pésame por el fallecimiento de la religiosa guatemalteca, así como para transmitir todo su apoyo tanto a la congregación, familiares y amigos de esta joven religiosa, al tiempo que se ha unido en oración a la Congregación de Marta y María, “impactada por el trágico suceso”.
El obispo ha destacado la labor de las religiosas de estos últimos años en la residencia Masides y el cariño con el que tratan a los mayores desde 2015, año en que se estableció la congregación en Aldeanueva del Camino, una población “que está conmocionada también por la noticia”.
La Congregación de Marta y María regenta 29 casas en la península y 9 en Canarias, fue fundada hace 36 años en Guatemala y tienen casas en Badajoz y Ciudad Rodrigo.
La capilla ardiente de la hermana Blanca, nombre que adoptó la religiosa la guatemalteca, está en el Tanatorio San Pedro de Alcántara, y el funeral será mañana en la residencia Masides de Aldeanueva del Camino.
Posteriormente el cuerpo será trasladado al cementerio de Valladolid (centro norte de España) para su sepultura, ya que, según el Obispado, la congregación tiene nichos y algunas casas en esta ciudad.