Añadieron que la mayoría de los equinos sufre de desnutrición y sangran de las patas, debido al peso y lo empedrado de las calles de la ciudad colonial.
Según vecinos, en la ciudad hay unos 10 carruajes y algunos están a cargo de menores de edad.
Integrantes de la Asociación Sol y Luna, que lideran la protesta, indicaron que presentarán a la comuna una propuesta de reglamento, para regular esta actividad dedicada al turismo.
Explicaron que un caballo llega a jalar hasta mil 600 libras, cuando el carruaje se desplaza sobrecargado.
El rechazo de la población creció esta semana, cuando en redes sociales circuló una fotografía en la que se observa un caballo tirado, supuestamente cansado por jalar un carruaje.
Sergio Rodríguez, vocero de la comuna, indicó que la municipalidad aún no tiene postura oficial, aunque afirmó que están autorizados 10 carruajes, cada uno con un caballo y que la licencia de salud del animal la extiende el Ministerio de Agricultura Ganadería y Alimentación.