Algunas personas en redes sociales criticaron la calidad de la infraestructura y además recomendaron a quienes transitan por el lugar a tomar precauciones debido a estos incidentes que en los últimos meses han sido recurrentes.
Autoridades de la Dirección de Protección y Seguridad Vial (Provial) afirmaron que ya empezaron los trabajos para recuperar el área y evitar un incidente mayor.
El 12 de abril pasado el presidente Jimmy Morales fue el encargado de habilitar este tramo vial que tiene el propósito de evitar largas filas de vehículos para pasar por Chimaltenango.
Semanas después, el 8 de mayo pasado, este paso vehicular presentó su primer incidente con una inundación luego de las lluvias registradas ese día.
En ese momento automovilistas lograron tomar fotografías y videos para reportar el incidente el cual fue criticado debido al poco tiempo que llevaba habilitada la obra.
El 13 de septiembre una enorme roca cayó sobre un picop que transitaba en el lugar, afortunadamente, no se reportaron heridos.
Asimismo, han criticado que dicha obra no cuenta con señales viales, por lo que también han ocurrido varios accidentes de tránsito.
Reparaciones
El director de Caminos, Juan José Hanser, indicó que la empresa que se encargó de la construcción del libramiento de Chimaltenango, llegará a trabajar luego que se reportara la situación.
Agregó que Caminos no deberá incurrir en gastos porque existe una fianza de procedimiento de obra, y todo lo que sucede en el trayecto correspondiente corre a cuenta de la empresa.
Cavernas de arena
En mayo pasado Prensa Libre recorrió el Libramiento de Chimaltenango e identificó los taludes, es decir los cortes que se efectúan en el terreno para hacer la carretera, pueden fallar en corto tiempo debido a la clase de suelo, explicó, en ese entonces, Flor González, consultora en medio ambiente y quien fue asesora de medio ambiente en la Dirección General de Caminos.
La experta, afirmó en mayo que los taludes del libramiento tienen cavernas de arena, “la arena tiende a desplazarse y posee un ángulo de rozamiento nulo, al saturarse de agua, el suelo consolidado por medio de arenas es incapaz de mantener el talud vertical”, explicó.
En otro sector de la obra, los taludes están compuestos de arcilla negra y piedra laja quebradiza, “por lo que al saturarse de agua tienden a derrumbarse por rotura planar, es decir que toda la cuña de material se desgaja y se desliza a lo largo del talud”.
Otro de los aspectos técnicos señalados es que, en algunos kilómetros, el pie del talud está en el aire sobre las cunetas, pero normalmente tiene que haber un hombro de separación.
Además, el ángulo de corte es casi vertical y no tiene la inclinación necesaria para que funcione el ángulo de rozamiento.
La experta también detalló que las juntas o uniones asfálticas están mal ejecutadas.
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