Si bien desde hace meses se reportaban incidentes violentos por diferencias limítrofes y las fuentes de agua, se sospechaba que la amapola —que sirve para la fabricación de heroína— podría también ser uno de los focos del conflicto, al punto de evidenciarse que la erradicación de esa planta que las autoridades han hecho en el pasado no han dado resultados.
Cultivos alternativos
El vicepresidente Jafeth Cabrera aseguró ayer que la amapola que se encuentra en esas localidades nace allí, sin necesidad de sembrarse, y tienen sembradíos específicos y especiales para protegerlas, por lo que el Ministerio de Agricultura busca “cambiarles la mentalidad” a las personas que viven en esas comunidades para que sean productivas y puedan comercializar otros productos.
“Ustedes saben que se está construyendo la carretera de Tajumulco hacia la Costa Sur, 20 kilómetros que antes no existían y que realmente esta gente, para poder llegar a comercializar sus productos, tienen que venirse por todo el altiplano hacia la capital”, comentó.
Cabrera dijo esperar que la población entienda, porque también es cuestión de actitud.
“Si ellos van a seguir con la intencionalidad de ganar dinero sencillo, fácil, porque los cultivos de amapola nacen allí, sin necesidad de tirar semillas, entonces es una responsabilidad que tenemos que combatir con acciones concretas”, advirtió el vicemandatario.
Descartó que se busque la legalización del cultivo de esa planta y comercialización, como se propuso hace cinco años.
El ministro de Agricultura, Mario Méndez, opina que mediante el Plan de Agricultura Familiar se podría apoyar a las familias, no solo con granos básicos, sino también con cultivos no tradicionales y vegetales, para que puedan instalar sus propios centros de acopio, así como empacar y exportar.
A Méndez, quien evitó mencionar la palabra “amapola”, a la cual solo se refería como “el cultivo que usted menciona”, se le planteó que comunitarios argumentan que les es más rentable producir esa planta, porque tiene tres cosechas, lo que no sucede con otros productos.
“Desconozco la rentabilidad del otro cultivo, pero respecto de esto, sí pudieran haber tres cosechas. Podemos hablar de, por ejemplo, una cosecha de granos básicos y dos de vegetales. Así esta gente se estaría asegurando”, afirmó.
Población atemorizada
La población de Ixchiguán y de Tajumulco se mantenía ayer temerosa ante la incertidumbre de lo que pasaría con el estado de Sitio y la incursión de las fuerzas del orden del Estado, así como la reacción que podrían tener los grupos que impulsan las acciones violentas en ambos municipios.
Los pocos habitantes que quedaban en esas comunidades permanecían en sus casas, sin salir, en vista de que muchos optaron por abandonar temporalmente sus hogares y trasladarse a otros municipios o aldeas.
Hubo quienes se lamentaban por tener que dejar sus negocios, porque les representaría pérdidas económicas y problemas posteriores.
“Quiero que termine este conflicto y que se solucione este problema de una sola vez, por medio de la ley, por eso ahí está el gobernador, el presidente, los diputados, que tomen en cuenta este problema porque viene de muchos años”, expresó el comerciante Cecilio Gómez.
Asimismo, se quejaron de que algunas personas armadas los han llegado a sacar de sus comercios, por lo que viven asustados.
“No nos llevamos cosas de ellos. Yo vivo aquí, pero vamos a pedir posada; solo venimos por las mascotas que tenemos. Las autoridades ya hubieran hecho algo”, manifestó Juana Florinda Esteban López.
Agregó que se trata de un conflicto que han vivido sus tatarabuelos, abuelos y, ahora, sus padres, pero no quieren que sus hijos vivan entre la misma violencia.
“Porque eso es como una enfermedad, y lo que queremos es que se arregle el límite del territorio, pero queremos vivir en armonía. Somos hermanos, somos humanos, y hay un texto que deberíamos amarnos los unos a los otros, y no matarnos los unos a los otros”, enfatizó Esteban López.
Las barricadas que fueron colocadas en varios caminos también afectaron a muchos automovilistas.
“Yo iba a Tacaná por mi labor de ventas, de eso vivo y es mi ruta toda la semana. Es la primera vez que nos están tapando el paso. Ellos dicen que es seguridad para nosotros, pero las autoridades no se dan cuenta de que nos afecta”, denunció un piloto.
Este abogó por la resolución del conflicto y lamentó que las autoridades reaccionen cuando ya se ha llegado a los “extremos”.
Comienza despliegue
Un grupo de efectivos del Ejército llegó ayer a la Brigada de Operaciones de Montaña, en la cabecera de San Marcos, donde los mandos, junto a otras instituciones, comenzaron la fase de planificación para empezar a ejecutar el estado de Sitio, hoy, en Ixchiguán y Tajumulco.
Hasta el cierre de esta edición, los encargados de la Brigada no habían proporcionado la cantidad de soldados que han arribado al lugar para formar el contingente que incursionará para retomar el control y la gobernabilidad.
El jefe del Departamento de Prensa del Ministerio de la Defensa, William García, aseguró que soldados provenientes de Huehuetenango y Suchitepéquez serán los que intervendrán en la parte fuerte del conflicto en el transcurso de hoy, aunque evitó dar la hora, por razones de seguridad.
El funcionario comentó que durante la tarde y noche de ayer se darían las instrucciones al personal castrense y se afinaría la estrategia de incursión.
Notan reducción en disparos
Aunque se mantiene un ambiente tenso, a diferencia de días anteriores se pudo constatar que los disparos han cesado con el paso de las horas. Se cree que se debe a que los comunitarios han entendido que las fuerzas de seguridad ingresarán para retomar la gobernabilidad, y que se han vedado algunos derechos constitucionales, después de la ratificación del decreto de estado de Sitio.
Un soldado de la aldea Tuichán, Ixchiguán, aseguró que desde el lunes por la noche se notó un descenso en los disparos que procedían de la zona montañosa, ya que durante el mediodía del martes no se volvieron a escuchar detonaciones.|
La Procuraduría de los Derechos Humanos será garante en los procesos de intervención.
Sin salud ni educación por crisis
La ministra de Salud, Lucrecia Hernández Mack, quien acudió a una citación, aseguró que han tenido dificultades para atender en las áreas de Ixchiguán y Tajumulco, debido a los enfrentamientos. Sin embargo, no pudo detallar de qué tipo, porque la comunicación ha sido difícil.
Mientras, el ministro de Educación, Óscar Hugo López, comentó que desde días antes de que se declarara el estado de Sitio los niños no pudieron acudir a la escuela, por lo que se verificará si existe alguna forma de reponer los días perdidos.
Unos 250 maestros de las escuelas e institutos públicos que fueron cerrados en resguardo de los estudiantes, tras los enfrentamientos que ya llevan 12 días en las comunidades, fueron reconcentrados en la cabecera departamental. Para la psicóloga Andrea Arreaga, los niños son los más afectados en este problema limítrofe, por el ruido de las balas y otras razones.