El director del filme valoró la actuación de David, de 42 años, y expresó: “En los atletas, y en David en particular, encuentro la habilidad de avanzar sin dar vueltas. Ver cómo mejoró fue bastante impresionante”, dijo. “Tenía un profesor de dialecto y otro de interpretación. Parecía nervioso, pero a la vez decidido a hacer un trabajo genial”, añadió.
“Me deslumbró su integridad, disciplina y profesionalismo. Ha trabajado en esto incansablemente”, aseguró Charlie Hunnam, uno de los protagonistas de la película.
En una entrevista con el diario The Times, Beckham dijo que había practicado mucho para decir las 13 líneas que le tocaron. Al parecer, su esfuerzo no fue valorado por el público.
En marzo, Bekcham compartió una aterradora imagen en la que lucía un rostro desfigurado, la nariz extraña y unos dientes desastrosos, apariencia que no concuerda con la del exmodelo, pero se trataba de la transformación en su personaje.
David participa en la escena en la que Hunnam intenta sacar la espada de la piedra, y este pregunta dónde lo quieren, consulta que Beckham responde con un sarcástico, “Brincando en mi rodilla…”
“¿Dónde crees que te queremos?”, dice. Al ver que Hunnam no va a ningún lado, le grita, “Oye, ¡con las dos manos!”
