En 22 minutos en la duela, Pierce anotó seis puntos, capturó tres rebotes, dio una asistencia y robó un balón, haciendo vibrar al Staples Center una vez más, pero no pudo impedir que los Clippers perdieran por 104-91.
“Obviamente, es decepcionante ser eliminado, pero hay que reconocer que Utah fue mejor que nosotros. Me hubiera gustado tener un fin a lo Peyton Manning, pero no fue posible”, dijo en referencia al ex quarterback del equipo de football americano de Denver, que se retiró después de haber ganado el Super Bowl en 2016.
“Tuve la oportunidad de jugar mi último partido frente a mi familia, mis amigos, mis parientes”, insistió el alero.
Se retira sin el palmarés de Michael Jordan o Kobe Bryant, pero Pierce ha marcado la historia de la NBA, al menos como uno de los jugadores más notables y queridos de los Celtics.
Campeón de la NBA en 2008
Bajo su batuta, la franquicia de la famosa camiseta verde encontró el éxito en la década de 2000: en 2008, su aporte le dio a Boston su 17º título -y último- de la NBA, poniendo fin a veintidós años de sequía.
Dos años más tarde, volvió a liderar a los Celtics en la final, pero el astro de Los Angeles Lakers Kobe Bryant le arruinó los sueños en un séptimo partido de infarto, que le dio el título a los angelinos.
Señal de que Pierce estará siempre asociado a la historia de los Celtics, fue su simbólico adios a la afición verde cuando el 5 de febrero, jugando con los Clippers y durante su última visita a Boston, fue aclamado y ovacionados por los espectadores de la arena TD Garden.
A pesar de que vistió las camisetas de Brooklyn (2013-2014), Washington (2014-2015) y desde 2015 la de los Clippers, donde se reunió a Doc Rivers, el entrenador de sus mejores años con los Celtics, Pierce sigue siendo venerado en Boston.
“Al baloncesto lo vamos a extrañar”
Los Celtics tienen la intención de hacerle firmar un contrato final, puramente honorífico, para que el segundo máximo anotador de la historia del equipo se retire oficialmente como jugador de Boston.
Nada indicaba que Pierce se uniría a las leyendas de los Celtics como John Havlicek, Larry Bird y Bill Russell.
Nacido en Oakland, California, partidario de los Lakers, pasó tres años en la Universidad de Kansas antes de ser seleccionado en la 10ª posición del Draft de 1998 por los Celtics.
Llegó con la reputación de una hablantin que molestaba a sus rivales para sacarlos de quicio. Pero enseguida estableció que además de ser un boquiduro, poseía también un disparo certero con el que encestó 26.403 puntos en 19 temporadas en la NBA.
Pierce es también un sobreviviente: El 25 de septiembre de 2000 recibió once puñaladas en la cara, el cuello y la espalda al intervenir en una pelea nocturna en un bar de Boston, lo que le hizo perder toda la temporada 2000-2001.
“Al baloncesto lo vamos a extrañar, eso está claro, pero tuve la oportunidad de vivir mi sueño de la niñez desde abajo, y es la hora de abrir un nuevo capítulo en mi vida”, afirmó el hombre de la eterna banda en la cabeza.
Paul Pierce en el Game 1 de Finales de 2008… salió lesionado sin poder caminar volvió y mató a los Lakers pic.twitter.com/b6rmpTk3cl
— The NBA Monster (@TheNBAMonster) 30 de abril de 2017