ESCENARIO DE VIDA
El grito de Independencia lo dio una mujer
Como sabemos, el 15 de septiembre de 1821 los próceres lograron firmar el Acta de Independencia, por parte de los actuales países de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica y ya han pasado 198 años de ese hecho histórico. Desde entonces, los centroamericanos hemos crecido con la idea que lo acontecido fue un grito de libertad. Sin embargo, muchos historiadores coinciden que nos independizamos de España por intereses socioeconómicos de una élite urbana española que mantenía privilegios sin importarle el resto de criollos, mestizos, ladinos o indígenas.
Para aclarar los términos, criollo se refiere a quienes eran descendientes de europeos nacidos y criados en el continente americano, pero faltos de prestigio social. Mestizo se refiere a personas con antepasados europeos y no europeos en un sistema de castas colonial español que era discriminativo, pues impedía o limitaba a los mestizos el acceso a la educación y a posiciones de mando y propiedad. Los “ladinos” son actualmente un grupo étnico que incluye tanto a la población mestiza, como a la población de ascendencia indígena que se considera mestizada culturalmente, se expresa en español como idioma materno y se viste a la usanza occidental. Este término surgió durante el período colonial para diferenciar a la población hispanohablante que no era parte de la élite colonial, peninsular o criolla, pero que tampoco era parte de la población indígena.
El género femenino también era parte de la discriminación por lo que a las mujeres les costaba ser escuchadas. Por ello, es meritorio mencionar a doña Dolores Bedoya, una mujer escuintleca de clase media quien dio el grito de Independencia el 15 de septiembre de 1821 antes de que lo hiciera nuestro vecino país, México.
Bedoya, una mujer extraordinariamente valiente y esposa del doctor Pedro Molina Mazariegos, fue la primera mujer guatemalteca en aprender a leer y a escribir, lo que considero un hallazgo, porque según los historiadores, en esa época era mal visto que una mujer se ocupara de culturizarse. Las mujeres de la época colonial debían dedicarse únicamente a su casa, a tejer, a bordar, a cocinar y a criar a sus hijos. Para suerte de ella, se encontró con un marido que no era machista. Por ello dicen que detrás de un gran hombre, siempre hay una gran mujer y juntos funcionaron como una gran pareja.
' No permitamos que ideologías foráneas nos vengan a gobernar.
Vida Amor de Paz
Bedoya estuvo siempre al lado de su marido y le instó a que luchara por nuestra independencia. A través de una reunión entre autoridades coloniales y una junta de notables ilustrados terminamos con el dominio español. Fue el movimiento independentista de los Estados Unidos, así como de la Revolución Francesa lo que nos sirvió de ejemplo para querer terminar con los privilegios para unos pocos y promover mayor tolerancia e igualdades para todos.
Que esta fecha nos sirva para reflexionar qué es lo que motivó a los Próceres para que nos independizáramos de España y que recordemos una estrofa de nuestro Himno Nacional que dice así: “Pues tus hijos valientes y altivos, que veneran la paz cual presea, nunca esquivan la ruda pelea si defienden su tierra y su hogar.” Amigos, no dejemos de luchar por nuestros ideales y esa paz que merecemos libre de conflictos sociales. No permitamos que ideologías foráneas nos vengan a gobernar. Hoy les invito a sintonizar la comida precolombina chapina y el jade de los antiguos mayas por Guatevisión, a las 14.30 y 20 horas, en Los Secretos Mejor Guardados. —FB: Lossecretosmejorguardados—