En el inmueble también hallaron una caldera, cocinas y materiales que sirven para la elaboración de droga sintética —éxtasis y cristal—, así como seis tinas, cinco cubetas y nueve toneles plásticos; 11 bolsas de soda cáustica, 10 sacos de sodio acetato anhídrido y cinco sacos de ácido tartárico.
La PNC también descubrió ocho toneles con elementos químicos, que enviaron al Instituto Nacional de Ciencias Forenses para que determine cuál es la sustancia exacta.
Además, fueron decomisados tres cilindros de gas propano, de cien libras cada uno, así como ventiladores y tinacos.
Las autoridades aseguraron que este desmantelamiento es un duro golpe para el crimen organizado, por su elevado valor.
Antecedentes
El 11 de junio último, la PNC desmanteló un laboratorio clandestino en Pajapita, San Marcos, cuyo valor estimaron en casi US$7 millones.
Diez días después —el 21 de junio— ubicaron otro narcolaboratorio en la aldea El Olvido, Malacatán, San Marcos. En el lugar fueron decomisadas tres calderas y 10 toneles, con precursores químicos para fabricar drogas sintéticas.
En lo que va del 2011, la PNC ha incautado 51 mil 560 libras (23 mil 388 kilos) de metanfetaminas y 470 mil 176 galones de precursores.
Las autoridades informaron que será el Inacif el que determine el tipo de sustancia contenida en 80 toneles localizados el martes último en Puerto Quetzal, Escuintla.