Noche agitada
Llevar las muestras a los lugares de encuentro es una fórmula con buenos resultados para atraer espectadores. Es el caso de dos fundaciones de arte que, además de una sala convencional, tienen sendas galerías en centros comerciales o agencias bancarias.
El jueves 19 de enero, a las 19 horas, abrieron tres diferentes, algo que es usual ocurra cada mes en la agenda cultural.
La Galería Guatemala, ubicada en la 6a, avenida y 11 calle de la zona 9, es uno de los espacios que tiene la Fundación G&T Continental, en cuyos muros colgó pinturas de aves de Robin Schiele. Este centro tiene un promedio de dos eventos mensuales.
La Fundación Rozas-Botrán inauguró en Paseo Cayalá una colectiva con las obras que figuran en los mupis de varias estaciones de bus, esta institución también cuenta con dos galerías y una agenda activa a lo largo del año.
La tercera propuesta de la noche consistió en las piezas de un grupo de estudiantes del Taller de Gráfica Experimental y se llevó a cabo en la Casa Municipal Antigua Imprenta Sánchez & Guise, en la 8a. avenida 12-58 de la zona 1.
Más oportunidades
Una visita a los recintos, antes de la inauguración, constató cómo en los primeros dos eventos la curiosidad atrajo a los visitantes que pasaban por el lugar. En el caso del banco, los clientes, al tener que atravesar el pasillo principal del edificio para ir de una oficina a otra, aprovechaban para apreciar las pinturas y leer las cédulas informativas al pie de las obras.
Algo similar ocurrió con la galería ubicada en el centro comercial. La colocación de un toldo, luces y música de ambiente fue determinante para que los visitantes se desviaran de sus planes originales y se sumaran.
Las oportunidades, dicen los galeristas, se incrementan al estar en un lugar que típicamente no se relaciona con un sitio cultural. Por ello, espacios alternativos han tenido éxito con proyectos expositivos que conviven en restaurantes o incluso bares.
El Museo Ixchel del Traje Indígena, en la zona 10, conoce también la modalidad. Si bien las dos salas que utiliza para sus muestras temporales están adentro de un recinto cultural y “formal”, se aprovecha del movimiento de estudiantes universitarios y de otros niveles escolares, así como del público extranjero para agregar audiencia.
El jueves 19, cuando el estrés del día tenía al límite a museógrafos y galeristas en tres centros, ahí la dinámica era distinta pues se acordaban los últimos detalles para la primera de varias muestras del año, con pinturas de Carmen de Pettersen, la que será inaugurada el miércoles 15 de febrero y se complementará con dos conferencias.
“La asistencia se eleva el día de la inauguración, pero hay afluencia nuevamente cuando se organizan actividades que enriquecen la exposición y le dan más kilometraje, como talleres, charlas, mesas redondas y visitas guiadas. Debe incentivarse ir a a museos y galerías en las generaciones más jóvenes. Los padres deberían exponer más a sus hijos a la cultura”.
Cecilia Díaz / directora de eventos y comunicación del Museo Ixchel.
“Nuestras exhibiciones captan la atención de grupos escolares o artistas y nos piden un recorrido guiado o notifican que harán uno. En la Galería Guatemala es gratificante ver cuando se detienen a apreciar la exposición de temporada, ya sea antes o después del trámite que los llevó a la agencia”.
Mariflor Solis / directora de Fundación G&T Continental.
“Para las inauguraciones tenemos lleno completo, llega un público heterogéneo en el que se distinguen las familias de los artistas y los estudiantes de las escuelas de arte. Al transcurrir los días las visitas son más individuales, en cualquier hora hábil. Durante la vigencia se llevan a cabo cerca de cuatro visitas guiadas para estudiantes de secundaria”.
Thelma Castillo / Fundación Rozas-Botrán.