“Este impresionante crecimiento hace al mercado de vehículos de nueva energía de China el mayor del mundo y lo seguirá siendo en el futuro”, afirma el presidente y consejero delegado del Grupo Volkswagen en China, Jochem Heizmann, en declaraciones a Efe.
La movilidad verde cotiza al alza en la segunda economía mundial y cada vez atrae a más marcas, porque interesa a más consumidores.
“Creemos que los vehículos de nueva energía no encuentran en otros países los niveles de aceptación que tienen en China tanto por parte de los consumidores como del Gobierno”, señalan a Efe fuentes del fabricante chino BYD, líder de ventas de vehículos híbridos y eléctricos en el país.
Sólo en 2015, el Ejecutivo chino destinó 33.400 millones de yuanes (unos US$4.900 millones, 4.600 millones de euros) a subsidios para estimular el desarrollo de los automóviles ecológicos.
El Ministerio de Industria planea mantener su programa de apoyo al menos hasta 2020, si bien tiene previsto endurecer los requisitos tras los casos de fraude destapados en septiembre del año pasado, cuando se descubrió que varias empresas manipularon sus datos para recibir más subsidios.