El pasado 1 de enero, Wagner murió al caer de su motocicleta. Los fuertes golpes y la falta de uso del casco, provocaron que el joven muriera al ingresar al hospital local.
La mañana del pasado 3 de enero fue el sepelio. Familiares y amigos realizaron una caminata hasta llegar al cementerio. La sorpresa del público fue encontrarse con Sereno, quien no dudó en demostrar el amor hacia su dueño.
“Durante el recorrido el equino se acercó al ataúd e inclinó su cabeza y derramó algunas lágrimas”, comentó Wando.
Este momento fue grabado por los usuarios que observaban el sepelio. En ellas, también, se escuchó relinchar al animal, quien le brindó una calurosa despedida a su dueño.
“Sereno era todo para mi hermano, el caballo sabía que su jinete no regresaría”, concluyó Wando.