Los únicos momentos que se le ve en los pasillos del asilo, es para la hora de la comida.
A pesar que Juan no puede ver con el ojo derecho, sus pasos son firmes y se muestra confiado al caminar.
Uno de los artículos favoritos de Juan Ramírez es su gorra anaranjada. Él padece de presión arterial alta.
La historia de Juan Ramírez es poco conocida, ya que no habla y se mantiene en su habitación durante el día.
Los únicos momentos que se le ve en los pasillos del asilo, es para la hora de la comida.
A pesar que Juan no puede ver con el ojo derecho, sus pasos son firmes y se muestra confiado al caminar.
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